Barcelona, una ciudad que se reinventa
El profesor Tornabell apunta el modelo del municipio que gestiona el puerto de Rotterdam lejos de injerencias de la capital.
Conocemos algunas propuestas de las elecciones municipales. Los candidatos dan más importancia a la justicia social y a la participación de los ciudadanos y sus planes parecen modernos, y algunos audaces. Tenemos magníficos antecedentes de lo que puede conseguir el liderazgo de un alcalde, pues gracias a los Juegos Olímpicos que él propició y organizó, Pasqual Maragall amplió la apertura de Barcelona al mar, respetó la casa donde vivió Cervantes y estuvo atento a los emigrantes gracias a Francisco Candel en
Els altres Catalans. Todos los humanistas saben que en Europa lo importante son los ciudadanos, a diferencia de las ciudades de Estados Unidos, que están hechas para los coches.
Durante los gobiernos de centroderecha luchó a favor de la creación del Área Metropolitana. Fue una batalla larga, per- versa y maquiavélica, dominada por el afán de poder de sus contrincantes, que desgraciadamente ganaron. Él perdió con nobleza y todavía ahora numerosas oportunidades esperan su momento. Publicó un manual en francés, inglés y alemán y viajó por el mundo para dar a conocer las oportunidades para los artistas, intelectuales, industriales y las grandes multinacionales que dominan los mercados mundiales. En una conferencia en la Politècnica, Maragall nos recordó lo que había planteado Václav Havel, el último presidente de Checoslovaquia y primer presidente de la República Checa (de la noche a la mañana, el país se dividió en dos, con toda normalidad). Ha-