Vuelta a las operaciones
Tras años de pasividad, los fondos regresan con apetito inversor a España. Buscan empresas de todos los tamaños para adquirirlas o inyectar capital
Tras años de gloria antes de la crisis, el capital riesgo ha sufrido su propio calvario durante la recesión. En los últimos años se produjo la tormenta perfecta para que algunos fondos no captasen recursos nuevos de sus inversores, otras firmas tuvieron que esforzarse en acompañar a sus compañías participadas para que sobreviviesen y creciesen, la mayor parte de las veces saltando al extranjero. E incluso, algunas compañías han desaparecido del panorama español. Es el caso del fondo británico Apax, que echó el cerrojo para siempre, o el grupo 3i que está en el punto de hacer las maletas.
El año 2014 representa un ejercicio de inflexión para el sector. Volvió la inversión, las operaciones, las desinversiones y los fondos fueron capaces de captar nuevos recursos. El pasado ejercicio, en el 2014, el sector realizó más de 460 operaciones en España cuyas inversiones ascendieron a 3.400 millones, un 30% más que el ejercicio anterior. Las desinversiones se multiplicaron por tres, hasta 4.666 millones. Y las sociedades lograron levantar fondos por valor de 4.300 millones, casi un 90% más que sólo un ejercicio antes.
Ahora, de nuevo, vuelven a saltar a la palestra transacciones de calado. Esta misma semana se supo que el Cirque du Soleil ha acabado en manos de un fondo de inversión o el fondo británico Permira vendió los congelados Iglo por 2.600 millones a dos magnates. Y siguen trascendiendo operaciones cuyos nombres son conocidos. Bien en el ámbito internacional, bien en el doméstico. Con operaciones de todos los tamaños y de distintos sectores. En España, por ejemplo, el empresario Juan Abelló y los fondos KKR y Proa Capital han puesto a la venta su participación del 49% en la gestora de aparcamientos y centros logísticos Saba Infraestructuras. O el fondo CVC sopesa sacar a bolsa el grupo sanitario IDC Quirón hacia finales de año.
Además, instituciones públicas como el ICO o el CDTI están lanzando programas para constituir fondos, con el objetivo de promover compras y apoyar a empresas, sobre todo a pymes, para que logren financiación. El ICO ha comprometido 755 millones para invertir unos 2.500 millones, pe- ro esa iniciativa de la Administración ha conseguido movilizar unos 9.300 millones porque se han montado vehículos inversores captando recursos de otros inversores internacionales.
Según el presidente de la patronal, Ascri, Javier Ulecia, “existen unos 100 fondos operativos en España, de los cuales unos 50 son de private equity ( grandes operaciones), unos 25 de venture
capital (operaciones medianas) y otros 25 fondos son de tamaño más pequeño o locales.
La diferencia entre las firmas de private equity y las de venture
capital es que las primeras siguen protagonizando operaciones más generalistas, en las que sustituyen al accionariado al comprar buena parte del capital. Por el contrario, las de venture capital hacen operaciones más sectoriales y, habitualmente, se dedican a inyectar capital mediante ampliaciones de capital y el mante- niendo del equipo directivo.
Del total de las inversiones, un 10% ( unos 300 millones) los han protagonizado las firmas de venture capital. Este segmento del mercado invierte habitualmente en cuatro sectores: internet, biotecnología, tecnología y renovables o industrial.
Una muestra de que las firmas que protagonizan operaciones de menor tamaño van tomando fuerza es que la patronal, Ascri, está por primera vez en 30 años presidida por una firma de venture capital.
No obstante, las grandes operaciones las siguen protagonizando fondos internacionales. De lo invertido el año pasado en España, un 80% fueron grandes operaciones. Cuarenta y dos de las grandes operaciones las protagonizaron fondos internacionales y 18 de ellos era la primera vez que invertían en España.
Algunos han llegado para quedarse. Es el caso de KKR, que abrió oficina, los suizos Esprint Water, los alemanes Aurelius o los franceses MBO Partners. Son nombres que llevan meses sondeando el mercado y pronto protagonizarán grandes titulares. Buscan oportunidades por todo el mundo y sus casas matrices les han dado órdenes de buscar compañías atractivas en España.
Así pues, competirán con fondos soberanos, fondos inmobiliarios y family office por buscar compañías atractivas. Una alternativa a la financiación bancaria que siempre estuvo ahí, pero que vuelve a tomar fuerza.