El ‘black friday’ llega y se queda
Un 20% más de comercios han hecho campañas de descuentos este año para esta promoción de origen anglosajón
Las empresas on line en España facturarán ese día un 10% más que el año anterior, según un estudio
Ya está aquí y no volverá a irse. El black friday (la traducción viernes negro no le hace justicia) se ha incorporado a los comercios en España. Durante este día, las empresas se deshacen de los stocks en vista de la campaña de Navidad y ofrecen grandes descuentos. Originariamente, es el viernes siguiente a Acción de Gracias en EE.UU. (inicio de las compras navideñas) y, como Halloween –pero menos sangriento–, se ha extendido a otros países.
Adigital ha elaborado un in- forme con previsiones en España para los días que van desde el black
friday hasta el cybermonday (el equivalente, pero en digital y el lunes), del 27 al 30 noviembre. Las ventas–en el comercio online– este año alcanzarán los 1.172 millones de euros, se facturará un10,6% más que el año anterior y habrá un 20% de empresas involucradas.
Estas fechas ya representan el 6,4% del comercio electrónico en España. “El hábito se ha instalado y es incluso probable que aparezcan otras fechas a lo largo del año con motivos para descuentos”, explica José Luis Zimmermann, uno de los autores.
“Los españoles han integrado rápidamente esta tradición y prevemos que este año será uno de los días con más compras de la historia”, afirman desde Amazon, que importó esta fecha hace tres años. Ese día, las compras en Amazon, que ofrece descuentos que duran minutos, pueden triplicar las de un día normal.
En cuanto a los puntos de venta en la calle, César Castillo, director general de la Fundación ICIL, organismo que reúne a profesionales de la cadena de suministro, confirmaque“se está consolidando enlas grandes cadenas. Nosólo es que están acostumbradas, sino que dirigen y orientan estas compras, que son 100% impulsivas, y que suponen una aceleración del consumo navideño”. “Sin embargo –destaca–, todavía cuesta implantar esta costumbre en las tiendas más pequeñas, que pueden tener problemas para gestionar los stocks y quedarse sin mercancías. Para que no mueran de éxito, conviene en estos casos asociar la campaña de promoción con las ventas on line, porque ahí se puede ser más flexibles con los plazos de entrega”.
Curiosamente, mientras en Europa hace furor, en EE.UU. este evento está cada vez más cuestionado. Elblackfri da y tiene tal magnitud que muchos puntos de ventas no quieren dedicar muchas inversiones logísticas y de marketing para estimular unas ventas en lasque tendrán márgenes más reducidos. La National Retail Federation ha tenido que salir públicamente en defensa de esta tradición. “El black
friday no está muerto. Siempre seguirá siendo importante”, aseguran. Todavía este ritual del comercio pesa entre un 10 un 15% en las ventas del año en Norteamérica.