En busca del plan de pensiones adecuado
La baja rentabilidad y el dilatado horizonte inversor obligan a afinar la decisión
Para un contribuyente que trabaje por cuenta ajena, casi la única -y más importante-medidaque puede tomar de aquí a final de año para rebajar su factura fiscal es una aportación a un plan de pensiones. Ahora la pregunta es si es una buena idea contratar un producto que complemente la jubilación pública pese a a que no siempre ha gozado de buena fama por su baja rentabilidad -que hoy oscila entre el 1,7% y el 6,4% anual- y el dilatado horizonte temporal de la inversión.
Lo primero que debe quedar claro es que con un plan de pensiones no se ahorra el contribuyente el pago de impuestos sino que los difiere en el tiempo. El funcionamiento de los planes de pensiones es que rebajan la base imponible (dinero sobre el que se tributa) en la misma cantidad que lo aportado al plan de pensiones. Así si un cliente tributa al 20% y aporta 1.000 euros, Hacienda le devolverá 200 euros. Lo que sucede es que cuando recupere el dinero se dará la circunstancia inversa: si rescata 1.000 euros deberá pagar a Hacienda el 20% (o el tipo al que tribute).
El segundo elemento que históricamente ha frenado el desarrollo de este producto es que no se permitían rescates de las cantidades invertidas hasta que el inversor se jubilara, sufriera paro prolongado o enfermedad. Ahora ha cambiado. El Gobierno del PP modificó la norma para permitir rescatar el dinero a los 10 años de forma general. El presidente de la Asociación de Instituciones de Inversión Colectiva y Fondos de Pensiones (Inverco), Ángel Martínez-Aldama, asegura que las aportaciones crecen a un ritmo del 70%. El problema es que a día de hoy el Gobierno no ha desarrollado la ley que determinará cómo se pueden llevar a cabo esos rescate. Martínez-Aldama cree que hay tiempo (enrealidad 10 años) aun que opina que sería bueno tenerla cuanto antes.
Los cambios legislativos es uno de los elementos que más influyen en los planes de pensiones. El cambio introducido en el 2007 para las nuevas aportaciones por el que se eliminaba el 40% de la reducción fiscal en los rescates frenó las contrataciones. La crisis económica que llevó a algunos planes a rentabilidades negativas hizo el resto.
En el cambio normativo introducido desde el 1 de enero de este años eh a reducido el límite de aportaciones de forma general al 30% de los rendimientos netos de trabajo o 8.000 euros frente a un máximo de entre 10.000 y 12.500 que había anteriormente. Cuando el ministerio de Hacienda anunció los cambios legislativos justificó la reducción del importe
máximo hasta los 8.000 euros porque era muypoca la gente que realizaba la aportación máxima.
Luis del Amo, secretario técnico del REAF-REGAF asesores fiscales, señala que es normal que “la gente a los 25 años no se metiera en un plan” porque tener inmovilizado el dinero durante 30 años hasta la jubilación era excesivo. “Ahora cuando no se está tan lejos la posibilidad de recuperar el dinero con el horizonte de los 10 años se ve mejor”, añade Del Amo. No obstante, el experto del Consejo General de Economistas duda que el gran público conozca los cambios introducidos.
En beneficio de los planes de pensiones Martínez-Aldama recuerda que cuando un cliente recibe la devolución fiscal correspondiente a su aportación puede reinvertirla. Por lo tanto si se hace una gestión activa y se
La rentabilidad media anual –neta de gastos y comisiones– de los planes oscila entre el 1,7% y el 6,4%
reinvierte en un depósito o cualquier otro producto la devolución de Hacienda que genera un plan de pensiones, la rentabilidad global del producto es superior. Además, el presidente de Inverco explica que como norma general en el momento en el que se rescata el plan de pensiones una vezel inversor está jubilado el marginal que paga a Hacienda es inferior al que tenía ese trabajador cuando estaba en activo. Por lo tanto la factura fiscal se reduciría.
La norma actual también contempla que un cliente pueda tener más de un plan de pensiones a la vez incluso en diferentes entidades. Lo único que no se permite es que la aportación global para los diferentes planes anual supere los 8.000 euros. Sobre si es adecuado diversificar el ahorro de planes de pensiones en varias gestoras, Martínez Aldama dice que es una opción pero que lo mejor es buscar un producto queseajuste al nivel deriesgo del cliente.