Marcados por la luz
Modelada por Daniel Rybakken, permite un vasto campo expresivo
Este cambio de año viene marcado por la luz. En el 2015 concluye el Año Internacional de la luz, declarado por la ONU con el fin de difundir en la sociedad la importancia de la luz y sus tecnologías asociadas a áreas fundamentales como la energía, comunicación o salud. Por su parte el 2016 marca el final del calendario establecido por la Unión Europea para la eliminación de las bombillas incandescentes y halógenas no eficientes.
Hace menos de siglo y medio que Thomas Edison patentó la primera bombilla eléctrica incandescente. Junto a su equipo, formado por un centenar de ayudantes, se realizaron 1.600 experimentos diferentes para dar con el filamento óptimo. Su bombilla ha prestado un gran servicio. Y el destierro definitivo dada su poquísima eficiencia frente a nuevas tecnologías es ley de vida. El led se erige hoy por hoy en la fuente de luz del futuro. Ylos mejores diseñadores la incorporan indefectiblemente. La investigación en el campo de la luz artificial abarca muchos frentes. También la creación de nuevas calidades capaces de generar atmósferas diferentes en los interiores de las casas y demás lugares que habitamos. Si a lo largo del día la luz solar varía en intensidad y temperatura de color y adquiere diversidad de matices, que pueden multiplicarse según sea filtrada, la luz artificial en manos del diseñador es susceptible de ser continuamente modelada. Su naturaleza intangible gana fuerza en el desarrollo material de una lámpara. Y a la solución funcional de iluminar añade el poder expresivo. Entre los diseñadores contemporáneos de luminarias que des- puntan se encuentra el noruego Daniel Rybakken (Oslo, 1984). Es con una de las tipologías más antiguas, la araña suspendida de techo, con la que logra uno de sus mayores lucimientos. Quizás porque se trata de una lámpara que nació para vestir grandes salones y atraer miradas. “Los chandeliers clásicos –señala Daniel Rybakken– habitualmente están construidos con una estricta repetición simétrica de objetos pequeños con detalle, como prismas de cristal tallados. En la lámpara Stochastic el objeto que se repite está simplificado, pero al pender con alturas aparentemente aleatorias en el espacio, crea una nueva complejidad”. El ingenio que incorpora la tecnología led queda oculto en el centro y contrasta con las esferas de vidrio de borosilicato. La luz que emite rebota y se refleja dentro del conjunto. En sus dos acabados metalizado u opal, ofrece versiones diferentes en difusión y reflejos. Rybakken logra un plenamente contemporáneo sin incurrir en las revisiones paródicas de algunos de sus coetáneos. Propone una luminaria radiante para una espacio amplio, que cobra el aspecto casi de joya. Pero en vez de iluminar a quien la lleva, lo hace en la estancia donde se encuentra, a la escala apropiada.
Como buen mago de la luz, Rybakken no se repite en sus juegos y dispone de múltiples bazas para crear ilusión óptica y atmósfera ambiental. La lámpara de suelo Colour brilla por su simplicidad. Construida a partir de tres láminas: dos de vidrio tintado en color rosa y azul, combinado con un círculo difusor blanco de luz, se inspira en el cambio natural de la luz solar. Simplemente apoyadas en el suelo y pared, se puede variar la composición. Luz y planos generan un efecto de tridimensionalidad, casi de escultura de luz.