Entre el cielo y la tierra
Aldo Urbano Pérez (Barcelona, 1991) se graduó en Bellas Artes por la Universidad de Barcelona y la Willem de Kooning Academy (Holanda). Ha mostrado su trabajo de forma individual en El Passadís ( Gran Muelle, Barcelona 2015) y recientemente en La Puntual ( Are those ice creams or mountains?, Sant Cugat, 2015). Actualmente presenta la exposición Imitar el movimiento de un espejismo, en la galería Balaguer, y trabaja en un proyecto de edición con la Sala d’Art Jove.
En las obras de la muestra coexisten composiciones monocromáticas con otras que parecen flechas que aspiran a transitar por el cielo. En el primer caso la disposición colorística invita al ojo a dejarse engañar por la diversidad tonal que puede imponerse o situarse en el soporte con la intención de apenas rozarlo, para conseguir un lenguaje profundo y potente o manifestar una levedad donde lo único que se decanta es una poética de la sutileza.
Cuando uno se enfrenta a la obra de un artista tan joven como este barcelonés corre el riesgo de que su apuesta nunca llegue a materializarse como un éxito completo, pero el aroma que trasciende de estas composiciones nos permite una notable esperanza, a la que no es ajeno el ojo de que disfruta el galerista, Fidel Balaguer, que en la última década ha colocado en el éxito a un significativo número de los
oao- artistas que han transitado por los diferentes espacios donde se ubicaron sus galerías.