El triángulo de oro del Maresme
En Sant Andreu de Llavaneres, Sant Vicenç de Montalt y Caldes d'Estrac se venden las casas más exclusivas
Conocidas como Les Tres Viles, estas localidades vecinas del Maresme central, justo encima de Mataró, han sido desde el siglo XIX uno de los lugares de veraneo más selectos del litoral barcelonés. Y de hecho, en este triángulo de oro sigue concentrándose la principal oferta inmobiliaria de alto standing de la comarca, tanto si se trata de residencias vacacionales como de un número creciente de primeras viviendas.
Según un estudio reciente de la agencia Bourgeois Prime, los precios de la vivienda en Les Tres Viles incrementaron un 8% en 2015. Una tendencia que, en opinión de su director, Xavier Bourgeois, "se mantendrá a lo largo de 2016, con una subida media del 6-8% e incluso algo más en determinadas urbanizaciones y edificios muy
prime. También están aumentando las transacciones, aunque se vende lo que está a precio, sobre todo casas entre 500.000 y 800.000 euros con superficies que van de los 250 a los 350 m2 y terrenos de 1.000-1.500 m2".
En la misma línea, Anselma Cabrera, directora de la inmobiliaria local Premium Luxury Housings afirma que "vemos muchos indicios de recuperación en los inmuebles de máscalidad que se han ajustado a los precios de mercado, con una subida de precios suave y un aumento de operaciones de un 40%, con previsiones muy buenas en lo que queda de año".
En cuanto a las preferencias de la demanda, Cabrera subraya que "si se trata de una segunda residencia, piden una sola planta con un gran jardín y piscina, exclusividad y privacidad, mientras que quien quiere vivir todo el año opta por pisos grandes en zonas cercanas a los núcleos urbanos".
Por su parte, Bourgeois señala que "tenemos muchos clientes que ya viven en la zona o se tras- ladan desde Barcelona o Mataró buscando una vivienda de mejora, y también bastantes extranjeros, sobre todo franceses, ingleses, alemanes y algunos rusos".
Entre las ubicaciones más cotizadas de siempre destacan el paseo dels Anglesos, en Caldes d'Estrac –municipio también llamado popularmente Caldetes– y el del Marquès de Casa Riera, en Sant Vicenç, donde se suceden las mansiones de época. Sin embargo, el área con más presente y futuro es probablemente la contigua a Port Balís, un puerto deportivo de referencia "donde se vende muchísimo y en el que un amplio porcentaje de propietarios de inmuebles tiene también una embarcación", como indica Anselma Cabrera.
Aquí se empieza a reactivar poco a poco la venta de solares y nuevas promociones, "tanto autoconstrucción como incluso grandes proyectos de fondos internacionales", asegura Bourgeois.