El mejor humor
El galerista Francesc Mestre recibió en La Nit del Galerisme, el pasado 7 de junio, un merecido premio por su trayectoria profesional. Quienes leyeron la entrevista que le dedicó la sección de cultura de este diario con motivo del premio pudieron hacerse una buena idea de su carácter independiente, librepensador y también empático y simpático. Lo que tal vez no saben es que, además, su biografía personal daría para un buen documental o un buen libro.
Situada en el tramo central de la calle Enric Granados, Francesc Mestre Art es una de esas galerías barcelonesas que es recomendable visitar con asiduidad, incluso cuando el nombre del artista expuesto nos pueda resultar desconocido. Una de las principales líneas de trabajo de esta galería es la que se ocupa de la obra sobre papel, que es más asequible para el coleccionista. Mestre suele exponer obra gráfica original y dibujos de artistas de distintas generaciones, con predilección por el siglo XX y el contexto catalán. Presta atención al dibujo en todas sus facetas, y especialmente al dibujo de humor y a la ilustración de prensa. En esta línea son muchas las buenas sorpresas que nos ha dado este galerista, y la actual muestra es un ejemplo.
Los dibujos humorísticos de Antoni Roca (Barcelona, 1895-1977) tienen una gracia y una vitalidad fuera de lo común. No es un dibujante tan conocido como Opisso, Apa o Junceda, ni como algunos dibujantes de historietas posteriores. Tampoco se ha hecho justicia con los grandes del tebeo, desde las generaciones de posguerra (Coll, Cifré, Vázquez...) hasta las generaciones de la transición hacia la democracia (Guillem Cifré, Micharmut, Martí Riera, Antoni Calonge...). En cualquier caso, los dibujos de Roca resisten la comparación con lo mejor. Catalunya, como también Bélgica, Holanda y Valencia, es un ejemplo de país pequeño y sin embargo grande en imaginación y sentido del humor.
Los dibujos de Roca tienen una gracia y vitalidad fuera de lo común