Arma de diversión masiva
Muy eficaz gracias a la tracción 4x4, el Focus RS es casi un vehículo para especialistas, un devorador de curvas
Es el Focus más potente de la historia de la marca y el primero con tracción a las cuatro ruedas. Ford se ha ocupado de mantener toda la deportividad y exclusividad de las siglas RS en un compacto de 4,39 metros de longitud que tiene las prestaciones de un Porsche 911 Carrera. Es un rival directo de coches más caros como el Audi RS 3 o el BMW 135i xDrive, aunque no tiene ni la calidad ni la presentación interior de estos. Disponible solamente con la carro- cería de cinco puertas, el Focus RS es un coche prácticamente para especialistas, para un tipo de conductor que valore de manera incondicional la eficacia en carretera (o circuito) y las prestaciones. Su aspecto exterior es imponente, con una parrilla dimensionada para dar cabida a unas entradas de aire que refrigeren adecuadamente motor, frenos y turbo. Con una aerodinámica muy cuidada, destaca el alerón sobre el techo y el difusor trasero con la doble salida de escape integrada a ambos lados. Las llantas de 19 pulgadas, en negro, y las pinzas de freno Brembo en azul hablan bien claro de su fiera naturaleza. Con el motor de gasolina de cuatro cilindros, 2.3 EcoBoost, el mismo del Mustang, Ford ha trabajado bien en la admisión, escape y turbo para obtener 350 CV y un generoso par máximo (470 Nm). Las prestaciones dejan bien claras sus intenciones: 266 km/h de velocidad máxima y solo 4,7 segundos para llegar a 100 km/h. El cambio de seis velocidades es manual, pero la palanca tiene un tacto y un recorrido impropio de un RS. Una vez al volante, con unos asientos Recaro de excepcional sujeción lateral, sorprende la suavidad con que arranca. Todo parece fácil y suave, y la suspensión, aunque rígida, no es incómoda.
Curvas y circuitos
Por tanto, el compromiso entre eficacia dinámica y uso diario está resuelto con mucho acierto. Obviamente, el hábitat natural de este coche son las carreteras de curvas y los circuitos. La eficacia sobre el asfalto, y su extraordinaria capacidad de tracción, son sus grandes virtudes. Cuesta realmente poco ir deprisa con este Focus y asombra comprobar, curva tras curva, la ausencia de movimientos de la carrocería. Gira completamente plano, la dirección tiene una enorme precisión y frena con extrema solvencia. El sistema de tracción total es el gran culpable de la sensación de aplomo y eficacia que transmite, puesto que permite enviar hasta un 70% de par al eje trasero. Además, el conductor dispone de cuatro modos de conducción: Normal, Sport, Track y Drift. Este último modo permite que el tren trasero deslice con facilidad, para máximo disfrute del conductor en pista. La guinda a tanta eficacia sobre el asfalto la ponen unos excelentes Michelin Pilot Super Sport, 235/35 R19, de serie. El equipamiento incluye el sistema Active City Stop, cámara trasera o el sistema multimedia SYNC con pantalla táctil de 8 pulgadas.