El nuevo papel de las patentes
Cuando hablamos de patentes, las relacionamos con monopolios legales sobre inventos, a veces con dudosa aplicación industrial, utilizados para la exclusión de competidores. También como casi algo exótico, a pesar de que formamos parte de la Unión Europea y en España y en especial Catalunya, somos relevantes productores de publicaciones científicas. La realidad, sin embargo, es que en España el año pasado solicitamos 1.500 patentes europeas (el 34% , es decir 500, en Catalunya) por 20.000 en Alemania o 10.000 en Francia.
En el marco de la Innovation Union de la UE, cuyo principal objetivo es crear una economía del conocimiento para competir globalmente en base al desarrollo de productos y servicios de alto contenido tecnológico y valor añadido, las patentes, como uno de los instrumentos de referencia para capturar el valor económico de las inversiones en educación, investigación y desarrollo, tienen un papel esencial.
Yno sólo como un derecho de exclusión o negativo. Más bien al contrario. El desarrollo del mercado digital único europeo (centrado en 5G, Cloud Computing, Internet Of Things, Big-Data technologies y Cibersecurity), se apoyará en un sistema de estandarización que permita la adopción masiva por la industria de nuevas tecnologías disruptivas generadas en Europa. Dicho sistema de estandarización, deberá permitir que los fabricantes e implementadores de tecnología tengan acceso al conocimiento disruptivo contenido en las patentes esenciales para el desarrollo de mejores productos con diseños y prestaciones atractivas y diferenciadoras. Asu vez, los creadores de tecnología y titulares de dichas patentes podrán obtener un retorno económico justo y razonable, que les permita mantener sus inversiones en I+D.
Las patentes, en este escenario, adquieren una nueva dimensión como activo empresarial estratégico. Las patentes ya comienzan a tenerse en cuenta por la comunidad financiera, especialmente en Sillicon Valley. Para las empresas de mayor tamaño o tradicionales, la incorporación de una estrategia de propiedad industrial permitirá anticipar tendencias tecnológicas, identificar nuevos modelos de negocio y tejer alianzas, también con fusiones y adquisiciones.