CRÍTICA DE ARTE EL CÓMIC DE LOS AÑOS OCHENTA EN EL MUSEO
Es cierto que bastantes integrantes o militantes de movimientos de vanguardia incurrieron con entusiasmo en excesos dogmáticos y sectarios, pero debo reconocer que hay un aspecto del programa de algunas vanguardias históricas que meparece plenamente vigente: su reivindicación de la unidad esencial de las artes. En el siglo XXI esta actitud implica saber reconocer que la obra de un artista que se expresa mediante el cómic, el vídeo o la televisión (esto último, si le dejan), puede ser tan válida como la de un artista que se expresa mediante la pintura o la escultura. Aestas alturas debería estar muy claro que no hay artes mayores y menores, sino artistas mejores o peores. Pero no lo está. Yla prueba es que, todavía hoy, el hecho de que un museo español presente una buena exposición de dibujantes de cómic sigue siendo una excepción. Felizmente, esto sucede ahora en Valencia.
VLC. Valencia Línea Clara es el título de una espléndida expo- sición que presenta el IVAM hasta el 2 de octubre. Quien visite este museo puede disfrutar contemplando los dibujos originales del extraño y a menudo genial Micharmut, o del virtuoso en tinta y acuarela Daniel Torres. Ante los originales de sus páginas, pienso que sus mejores obras merecen ser republicadas a tamaño mayor, tal como se han editado recientemente algunas obras clásicas de Winsor McCay, Herriman, Hergé o Jacobs. Y merecen la misma atención los otros autores incluidos en la muestra: Mariscal, Calatayud, Sento, Mique Beltrán, etcétera. Son los dibujantes valencianos que en los años 80 publicaron en revistas como Cairo y otras.