Hibridación crossover
Kia y Toyota revolucionan el mercado de los crossovers compactos híbridos
Toyota es uno de los constructores con mayor experiencia y éxito en los segmentos del mercado relacionados con los 4x4. Sus míticos Land Cruiser han sido históricamente referentes entre los todoterrenos más especializados y, posteriormente, las diferentes generaciones del RAV4 supieron recoger el testigo para ofrecer nuevas propuestas, más eficaces en asfalto y más sostenibles en cuestiones medioambientales.
La firma japonesa da un paso adelante con el lanzamiento de un nuevo modelo, el C-HR, que llega al mercado para cubrir un segmento de moda, el de los crossovers compactos. Se trata de un producto atrevido por su imagen y su mecánica, heredada del Prius. Así se perfila como una nueva alternativa en la oferta de híbridos del mercado.
Por su parte, Kia continúa con su estrategia de expansión y crecimiento, añadiendo a su extensa gama un nuevo modelo, cargado de argumentos para triunfar. Como en el Toyota, en el Niro se han unido los conceptos de crossover y la hibridación, combinación idónea para atraer a un público joven, interesado tanto por el diseño como sobre todo por las nuevas tecnologías.
La rompedora propuesta de Toyota le convierte en uno de los modelos más originales del momento. Más convencional pero igualmente atractivo se muestra el automóvil de Kia, una estilizada propuesta que se encuentra a medio camino entre un SUV y un turismo compacto. Ambos automóviles apuestan por interiores cómodos, espaciosos y dotados de materiales de notable calidad, tomando ventaja el modelo coreano en anchura interior, tanto en las plazas delanteras como en las posteriores.
Si se apuesta por la innovación, la propuesta interior del C-HR se erige como la más adecuada. Por el contrario, si la prioridad son las cotas espaciales, el Niro dispone también de cierta ventaja en volumen de maletero, completando así un habitáculo de superior capacidad.
Limpios y ahorradores En el apartado mecánico, ambos vehículos combinan un motor de gasolina con un eléctrico. En el caso del Niro, el motor gasolina es un 1.6 GDI de 105 CV y el eléctrico rinde 44 CV. Toyota opta por un bloque gasolina de mayor cilindrada, 1,8 litros, con 122 CV, combinado con dos motores-generadores eléctricos.
En el japonés, uno de los motores eléctricos hace las funciones de generador y se encarga de convertir la potencia sobrante en una electricidad que es almacenada en una batería de hidruro de níquel, que recupera un 28% más rápido su carga. El segundo motor eléctrico es responsable de proporcionar tracción eléctrica y cumple también funciones de generador cuando se utiliza el modo de conducción de frenado regenerador.
En la práctica, el Toyota exhibe registros de rendimiento ligeramente superiores, tanto en velocidad máxima como en capacidad de aceleración. La igualdad es máxima en el apartado de consumos, donde ambos brillan con medias homologadas por debajo de los 4 l/100 km. Además de máxima eficiencia, la conducción de Niro y C-HR ofrece diversión y seguridad.
Ambos fabricantes han trabajado en sus respectivos chasis para proporcionar un comportamiento eficaz y destaca el excelente rendimiento de la caja de cambios automático de doble embrague empleada por el coreano.
El Kia Niro y el Toyota C-HR combinan un perfil joven con la eficiencia mecánica y la tecnología híbrida