El sector local que conquista el mundo
Mango se expande con megastores mientras Desigual revisa su modelo para volver a crecer
Siguiendo la estela de los grandes grupos de la moda, los catalanes Mango y Desigual han construido en la última década dos modelos de éxito y se han lanzado a conquistar el mundo. Mango, propiedad de Isak Andic, mantiene su estructura íntegramente familiar y en los dos últimos años ha acelerado la expansión con la apertura de megastores en los principales mercados europeos. Después de una fuerte expansión en Barcelona, que culminó con la apertura en el centro comercial Glòries el pasado mes de diciembre, la compañía inaugura la próxima semana una tienda de gran formato en la calle Serrano de Madrid. En el 2014 la facturación de la empresa superó por primera vez los 2.000 millones de euros, y llegó a 2.327 en el siguiente. Los resultados de 2016 aún no están disponibles. En el 2015, la compañía alcanzó las 2.730 tiendas en el mundo, de las cuales cerca de 200 son de gran formato. Las nuevas tiendas, así como el desarrollo de nuevas instalaciones logísticas para el crecimiento de los próximos años, supondrán inversiones de 1.200 millones de euros en tres años. Para Mango, España supone el 19% de las ventas y el mercado europeo cerca del 75%.
Por su parte, Desigual, que en el 2015 se quedó a las puertas de alcanzar los 1.000 millones de facturación, está en plena fase de replanteamiento de su modelo. Tras veinte años de crecimiento, las ventas cayeron un 3% en el 2015 y en el 2016 otro 7,8%, hasta los 860 millones, y también sufre el beneficio de explotación. El 2016 fue el primer año en el que retrocedió su total de tiendas: con 30 cierres netos, quedó en 523, un proceso de “racionalización” que está previsto que culmine este año. La compañía fundada y controlada por Thomas Meyer, y en la que el fondo francés Eurazeo tiene un 9,8% desde el 2014, está también repensando su producto y su marca: “Sin perder el toque rebelde de sus orígenes”, espera “dar más oportunidades a sus clientes, y también incorporar un nuevo cliente menos agresivo”.