Enric Granados, un oasis exclusivo
Semipeatonaly muycéntrica, la calle EnricGranados deBarcelonase consolida como zonapremium
Soñar es gratis. Pero hay sueños que tienen un precio. Y muy caro. Vivir en la calle Enric Granados de Barcelona es uno de estos sueños de altos vueltos. Solo unos pocos privilegiados podrán materializarlo. "Los precios oscilan entre los 4.500 €/m2 de un piso para reformar hasta los 8.500 €/m2 de uno
top para estrenar", afirma Paloma Infante, directora de la división de L'Eixample de Engel & Völkers.
Pero, ¿cuál es el atractivo de esta calle? "Su privilegiada ubicación, a solo cinco minutos del paseo de Gràcia, y, sobre todo, el hecho de ser semipeatonal. Esto se valora mucho", sostiene Infante. Es lo más parecido a vivir en el corazón de la ciudad, pero sin tener que oír sus constantes y ruidosos latidos.
Encanto de pueblo bohemio-chic
La calle Enric Granados, que debe su nombre al célebre compositor y pianista catalán, está situada entre las calles Aribau y Balmes, y discurre desde la avenida Diagonal hasta la calle Diputació. Allí desemboca enunazonaestrictamentepeatonal, dondecafeteríashipsters, galerías de arte y viandantes que hacen un receso en uno de sus muchos bancos conviven con total naturalidad.
Pero esta calle no siempre ha sido así. Fue en los noventa cuando el Ayuntamiento decidió convertirla en una de las pocas calles semipeatonales de la ciudad. "El comprador valora mucho su tranquilidad, sin apenas coches... Estás a un paso del centro, pero mientras paseas es como vivir en un pueblecito", sostiene Oriol Canal, director general del MMCde Engel & Völkers.
Este espíritu local y bohemio, pasado por un restyiling chic, ha situado a Enric Granados en el mapa internacional. Literalmente. "El 70% de los compradores de pisos de esta calle son extranjeros. La mayoría llevan años en Barcelona, conocen esta calle y quieren vivir en ella", explica Infante. "De hecho, tenemos clientes que solo quieren que les avisemos cuando nos entre un piso aquí. No les importa esperarse el tiempo que haga falta, incluso años. Están enamorados de esta calle y no les interesa nada más", añade Infante. Este interés por Enric Granados hace que los pisos, cuando salen a la venta, vuelen. "Hay tanta demanda y la oferta es tan escasa, que muchas veces no tenemos ni tiempo de publicitar el piso. Con las primeras visitas ya se ha vendido", sostiene Canal. "Y eso que los precios son un 20-25% más caros en comparación con el resto de L'Eixample", añade Infante.
Pisos de 150 m2 en fincas regias
Pero, ¿cómo son los pisos de Enric Granados?"Deunos100-150m2yla inmensa mayoría en fincas regias o clásicas. Hay algunos más pequeños, fruto de segregaciones, y unos pocos de 250 m2, pero no es lo habitual", sostiene Canal. Y añade que los más buscados, y más valorados, son los áticos y los principales, ya que suelen tener terraza. Y en cuanto a la ubicación, Infante sostiene que no es tan importante que esté más cerca o lejos de la Diagonal, sino la tranquilidad y las vistas. "Un piso en la plaza de Letamendi o en la calle Diputació, con vistas al jardín de la universidad, tendrá más valor que uno que esté en un chaflán cerca de Diagonal con vistas a la calle". En este sentido, Canal añade que en Enric Granados se puede llegar a valorar más un piso que esté entre dos calles que uno en un chaflán, que suelen ser los más deseados en L'Eixample. "El chaflán es más luminoso, pero también más ruidoso". Dehecho, el ruido se ha convertido en el caballo de batalla de los vecinos, que en los últimos años han visto cómo el bullicio de terrazas, locales de ocio nocturno y restaurantes de moda ponía en peligro la tranquilidad de esta calle.
La casi inexistencia de obra nueva
Si el ruido era hasta hace poco un
rara avis en Enric Granados, también lo era la obra nueva. "En los úl- timos diez años, no se había hecho ninguna promoción en esta calle", asegura Gemma Castellví, directora comercial de Grupo Castellví. Hasta ahora, ya que en el número 52 está prevista una promoción de obra nueva que corre a cargo de este grupo inmobiliario. "Se respetará la fachada, pero el interior se derribará para construir de nuevo", explica Castellví. Están previstas unas diez viviendas de unos 150 m2 y, aunque las obras aún no han em- pezado, "la mitad de los pisos están reservados y muchos de ellos apalabrados. Esperamos empezar con todos vendidos", afirma. Y eso que los precios son de vértigo: "Desde 6.500 €/m2. La vivienda más económica costaría a partir de un millón de euros, y la más top rondaría los dos y medio. El cliente que busca un piso en Enric Granados es muy especial, le gusta mucho esta calle y quiere vivir en ella". Yno le importa pagar el sobrecoste, claro.