Carisma y liderazgo
El Renault Mégane es uno de los compactos más prestigiosos
El Renault Mégane es un automóvil compacto del segmento C, totalmente consolidado en el mercado, tras dos décadas de presencia caracterizadas por un considerable éxito comercial. Con una producción industrial muy ligada a la planta que la firma del rombo tiene en Palencia, este automóvil forma parte del listado de favoritos en los listados de aspirantes de los usuarios y siempre está en la zona alta del competido ranking de ventas existente en este segmento.
A pesar del reconocimiento obtenido por sus tres generaciones anteriores, desde Renault son conscientes de la necesidad de mejorar sus productos de forma constante y, con este objetivo llegaba la actual entrega, mejorando una vez más sus argumentos con la renovación de su modelo, para hacerlo aún más competitivo. Popular y reconocido por sus méritos, tres generaciones y más de 6,6 millones de coches vendidos le contemplan. Basada en una nueva plataforma, la cuarta etapa está llena de ambiciones.
Destinado a satisfacer las inquietudes y necesidades de un sector mayoritario de conductores, este automóvil destaca por su atractivo estético exterior, un factor fundamental en la elección y cuenta con un diseño muy distintivo, a la vez que personal, respecto a la mayoría de sus competidores en el segmento.
Uno de los puntos fuertes del Mégane es el habitáculo, que destaca por la funcionalidad y por la calidad de sus elementos. La posición al volante dispone de regulaciones óptimas y la opcional pantalla vertical de 8,7 pulgadas facilita al máximo su lectura. La amplitud es excelente, ofreciendo el espacio adecuado y necesario para tres ocupantes en las plazas traseras. El maletero, sin ser un referente, roza los 400 litros de volumen útil y permite ubicar varias maletas, sin estrecheces.
El equipamiento de serie es completo, destacando elementos como alerta por cambio involuntario de carril, ayudas al estacionamiento trasero y al arranque en cuesta, cambio automático de luces de carretera a luces de cruce, control de presión de neumáti- cos, ordenador de viaje, climatizador de dos zonas, sensor de lluvia, tarjeta manos libres, etcètera. La dotación opcional ofrece asimismo importantes posibilidades, sobre todo en aportaciones tecnológicas. Destaca el sistema Head up Display retráctil en color, primicia en su segmento, o la disponibilidad de pantallas, bien una horizontal de 7 pulgadas o la mencionada vertical de 8,7 pulgadas, que ofrecen toda la información derivada del sistema de conectividad R-Link 2.
El Mégane ofrece vanguardistas motores de gasolina de baja cilindrada, alimentados con un sistema de inyección directa. Es un bloque de 1,2 litros, turboalimentado, con una generosa respuesta a las órdenes del conductor, desde bajas revoluciones.
Con este propulsor, el automóvil francés ofrece una interesante aceleración de 0 a 100 km/h en 10,6 segundos y su velocidad máxima es de 197 km/h. La cifra de consumo homologado es de 5,3 litros, demostrando su saber hacer en este tipo de mecánicas. En la práctica, es posible obtener medias reales en carretera inferiores a los 6 l/100 km y un depósito de combustible con capacidad de 47 litros garantiza una notable autonomía de marcha. Una opción interesante, combinada con esta motorización, es la disponibilidad de una eficiente y confortable caja de cambios automática, de siete relaciones.
El modelo de Renault destaca por su agilidad de movimientos, exhibiendo un paso por curva superior al de su antecesor. Los más exigentes con el apartado dinámico pueden recurrir a las terminaciones GT.