Casas sostenibles, construidas en un mes
Arquima prevé invertir unos 600.000 euros en la adquisición de nueva maquinaria de automatización La empresa catalana Arquima, especializada en construcción pasiva –que permite construir en poco tiempo y ahorrar energía al propietario– ha inaugurado recientemente sedes en València y Granada –que se suman a las que ya posee en Barcelona, Madrid y Lugo– en su apuesta por la expansión nacional. Nacida en 2008 en Sant Andreu de la Barca –en plena crisis inmobiliaria– Ar- quima fue, según su fundador, José Antonio González, la primera empresa que introdujo el concepto de casa pasiva y sostenible en el Estado. “En esos momentos en España nadie hablaba del tema y fuimos pioneros. Esto, sumado al hecho de que tenemos fábrica y contamos con un sistema constructivo propio, nos hace estar a años luz de nuestra competencia nacional”. “Podemos construir una casa pasiva de 200m2en solo tres semanas. Yel objetivo, a corto plazo, es lograr reducir este tiempo a una”, añade el empresario, quien explica que prevén invertir 600.000 euros en la adquisición de maquinaria de última generación para lograr automatizar “todavía más” los procesos de construcción. Arquima ha llevado a cabo más de 30 de proyectos constructivos desde su puesta en marcha –la mayor parte de ellos en Catalunya– como casas unifamiliares, edificios plurifamiliares, hoteles e incluso equipamientos públicos como el centro de investigación del hospital Germans Trias y Pujol de Badalona. “La demanda de construcciones pasivas está empezando a crecer con fuerza, pues los precios de construcción son muy similares al precio de la construcción tradicional y, sin embargo, comportan un gran ahorro en el consumo energético”. De hecho, a pesar de que la empresa se planteó la internacionalización, ha decidido centrarse en el mercado nacional, donde existe un interés creciente por la construcción pasiva industrializada en zonas como la Costa del Sol y las Baleares, además de Catalunya y la zona norte. Arquima, que emplea a 25 personas, cerró el 2016 con una facturación de 2 millones de euros y prevé superar los 3 millones durante el presente ejercicio.