Médicos y emprendedores
Adan Medical cierra una ronda de financiación de medio millón para lanzar su producto al mercado a finales de año Un paciente le explicó a la alergóloga del hospital de Vall d’Hebron Anna Sala cómo sufrió un ataque en medio del bosque y se desmayó antes de poderse inyectar la adrenalina ante las dudas que le surgieron sobre si su autoinyector estaba en buenas condiciones o no. Por suerte para el paciente, alguien le encontró y llamó a urgencias, con lo que le salvó la vida.
Esta historia hizo que Sala se diera cuenta de que disponer de un autoinyector de adrenalina no es suficiente y compartió este pensamiento con el especialista en medicina interna de Vall d’Hebron Adrià Curran. Ambos desarrollaron Anapphylaxis, una funda para autoinyectores de adrenalina que, conectada vía bluetooth con el smartphone, avisa al usuario en caso de que se deje el medicamento en casa o bien si este se encuentra en mal estado. También activa un protocolo de emergencia automático si el paciente ha sufrido una reacción alérgica y ha usado el medicamento.
Anapphylaxis podría empezar a comercializarse a finales del 2018, según Xavier Guillem, CEOde Adan Medical Innovation, start-up creada para el desarrollo y comercialización de Anapphylaxis. “En marzo presentamos oficialmente en EE.UU. los resultados del ensayo clínico que avalan la efectividad de Anapphylaxis y ahora estamos buscando inversores y laboratorios que quieran implantar nuestra tecnología”, explica Guillem.
Sacar al mercado un dispositivo médico requiere de una gran suma de dinero. Adan Medical Innovation acaba de cerrar una ronda de inversión por medio millón de euros que se suma al medio millón de inversión inicial para la creación de la empresa.
Entre los socios fundadores de Adan Medical Innovation figuran los doctores Anna Sala y Adrià Curran –quienes siguen ejerciendo como médicos en Vall d’Hebron– y los emprendedores Xavier Verdaguer, fundador de Imagine, y el reconocido biotecnólogo Joaquim Trias, quien preside el consejo de administración.