La amenaza del petróleo
La espectacular subida del petróleo se ha convertido en un riesgo para el crecimiento. La ruptura del acuerdo nuclear con Irán y la crisis de producción de Venezuela no van a desaparecer a corto plazo. Esto podría llevar al mundo a una nueva espiral inflacionista que dañaría el comercio, pero que facilitaría el pago de la abultada deuda que mantienen países como EE.UU. y España. Es, por tanto, una amenaza relativa, que volvería a impulsar la extracción del ‘fracking’.