El camino hacia la subida de impuestos
Ciudadanos, autónomos y pymes quedarán al margen del aumento de la presión fiscal, asegura el Gobierno
La CEOE amenaza con no poder aplicar la subida salarial pactada con los sindicatos si sube la presión fiscal Los sindicatos defienden que hay margen para subir impuestos a las grandes empresas
Nuevoin quilinoenla Moncloaysubida de impuestos a la vista. La respuesta de la patronal ha sido inmediata y ha comenzado una dura campaña para frenar lo que parece un ineludible incremento de la presión fiscal del nuevo Gobierno de Pedro Sánchez de cara a principios del 2019. Son medidas para aumentar los ingresos, que apuntalen políticas sociales como la reducción del agujero presupuestario del sistema público de pensiones sin congelarlas, mientras intentan relajar el objetivo de déficit público como se ha propuesto hace apenas unas horas a Bruselas.Tanto es el temor a lo que pueda pasar que la CEOE hasta ha amenazado con dejar sin efecto la subida salarial a los trabajadores de entre un 2 y un 3% pactada con los sindicatos.
“Si suben los impuestos para reducir el déficit se reducirá la tasa de crecimiento de la economía”, sostiene María Jesús Fernández, economista de Funcas, Sólo se puede revertir ese efecto –a su juicio– si se destinan los ingresos tributarios extra, por ejemplo, a pagar más pensiones, que incrementarán la capacidad de compra de los jubilados, tirando de la demanda y mejorando el PIB.
El Gobierno de Sánchez afronta una subida de impuestos, una política siempre impopular y, por ello, insiste en que el esfuerzo fiscal correrá esta vez de la mano de las grandes empresas. “Ni ciudadanos, ni autónomos ni pymes”. Como explicó este miércoles la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, el incremento impositivo se produci- rá en dos fases. En la primera, tratarán de sacar adelante la implantación de la tasa a las empresas tecnológicas (recogida en los presupuestos gestados por el antiguo ministro Cristóbal Montoro). Las previsionesiniciales paralatasa Google eran recaudar 600 millones este año y 1.500 el próximo. También quieren introducir un tipo mínimo efectivo en el impuesto de sociedades del 15% para los grandes grupos (ahora está en el 12%, según Montero). El Ejecutivo prevé asimismo cambios en la fiscalidad verde. De esos nuevos impuestos verdes sólo ha trascendido la propuesta deequiparar “paulatinamente” el gravamen del diésel al de la gasolina, un incremento del precio del combustible que no afectaría a los transportistas. Está por ver cómo lograrán no tocar el bolsillo del ciudadano de a pie y recaudar entre los 600 y 2.000 millones que el PSOE estimaba hace solo unos meses. La experta de Funcas advierte que con la subida fiscal al diésel se puede incrementar en tres décimas la inflación.
¿Y el polémico impuesto a la banca para contribuir a las maltrechas arcas de la Seguridad Social y pagar las pensiones? Desde Hacienda habían dado a entender que la deci--