La regulación española impulsa la industria
Con una regulación cada vez más permisiva, actualmente vuelan 4.439 aeronaves no tripuladas en el país
Las empresas llegan a ahorrar hasta el 80% en costes de mantenimiento gracias a los drones
“La nueva regulación española, en referencia a los drones y su circulación, es la más avanzada de Europa a nivel de permisividad en diferentes escenarios”, explica Álex Gomar, director de Hemav, la empresa número uno en drones en Europa. Según los últimos datos publicados por el Ministerio de Fomento, actualmente ya vuelan en territorio español 4.439 aeronaves no tripuladas a manos de 3.052 operadores. El mercado a escala global está en auge gracias a la reducción de costes y al avance de las nuevas tecnologías. Muestra de ello es que el número de fabricantes se ha triplicado en los últimos 10 años.
Gracias a la nueva regulación del pasado diciembre son posibles los vuelos nocturnos, sobrevolar zonas urbanas y aglomeraciones de personas, así como utilizarlos en operaciones de tráfico. Deestamanera, su circulación está cada vez máscercade su etapa de madurez, aunque aún queda mucho camino por recorrer; por ejemplo, todavía faltan leyes para que puedan volar coordinándose con el resto de los usuarios del tráfico aéreo con total seguridad.
Uno de los primeros ámbitos en los que se implementaron drones fue la industria agrícola, y a partir de ahí los aparatos se extienden cada vez más por otros sectores cambiando los modelos tradicionales de trabajo. De hecho, se están haciendo imprescindibles para que las empresas sigan el ritmo de sus competidores, junto a la robótica y el blockchain. Cada año, las empresas de servicios básicos y las energéticas pierden 146.000 millones de euros en el mundo debido a fallos y paradas forzadas, según el último artículo de PwC “Clarity from above”. Carlos Bernabéu, director de Arbórea, empresa del grupo Iberdrola dedicada a los drones, explica que, con la aplicación aeronaves no tripuladas, estas pérdidas se llegan a reducir en gran medida. “Empresas como Iberdrola pueden llegar a ahorrar hasta el 80% en costes de mantenimiento de sus palas de aerogeneradores mediante drones”, explica Bernabéu.
El sector de la energía y el de los servicios públicos, columna vertebral de la economía, enfrentan nuevos desafíos, comola presión social por las energías renovables, tratando de encontrar formas de mantener la rentabilidad, así como el calenta- miento global, que continúa causando desastres naturales. LosUAV o drones crean nuevas oportunidades en dichos sectores –que incluyen servicios que van desde parques fotovoltaicos hasta el control de las carreteras o cubrimiento de incendios–. Pueden hacer inspecciones más baratas y seguras incorporando sensores con alta calidad de imagen o identificando el sobrecalentamiento de central es con el uso de cámaras térmicas.
“Todas las empresas del Ibex 35 que tienen infraestructuras ya trabajan o están en fase de prueba con drones”, explica Gomar, quien pone el foco del futuro de estas máquinas en la inteligencia artificial. Esto lo corrobora Nuria Ávalos, directora de experimentación digital de Repsol, empresa que ya ha probado drones para su actividad. Ávalos explica que “el reto está en el trata- miento y el análisis de datos obtenidos y en la utilización de la inteligencia artificial, para mejorar su desempeño y limitar la intervención humana”. Las previsiones son muy optimistas para estas máquinas. Enel 2050 se espera que en Europa crezcan hasta las 415.000 unidades y den 110.000 puestos de trabajo. Entonces ya se podrá ver un UAV como aerotaxi o transportando carga a largo alcance.