El capitalismo roto
El Nobel de la Paz Yunus pide rediseñar el motor del sistema para aprovechar el potencial de toda la gente
Para Yunus hay que ver a todo el mundo como emprendedor y no como mera mano de obra
El economista bangladesí Muhammad Yunus (Chittagong, 1940) creía que la beneficencia era una forma de eludir la responsabilidad, que perpetuaba la pobreza, que se transmitía de generación en generación enlas familias, y que loque hacía realmente falta en su país era dar oportunidades a los pobres de su país, que eran emprendedores potenciales. Fundó en el año 1983 el Grameen Bank para proporcionar servicios financieros a un mercado poco obvio: los más pobres, que al pedir dinero hacían frente a intereses de verdadera usura, de hasta el 10% semanal por un crédito. El Grameen bank cambió la situación con micro créditos–la inmensa mayoría para mujeres–para que llevarana cabo sus pequeños proyectos y el sistema logró tal impacto que se exportó a todo el mundo. Y Yunus recogió el Nobel de la Paz del 2006 como “el banquero de los pobres”.
Así se tituló un popular libro suyo y ahora regresa con otro de título redondo: Un mundo detres ceros, en el que ve el motor del capitalismo roto. Los problemas que acucian a los pobres, remarca, no quedan restringidos a los países en vías de desarrollo como el suyo, sino que las personas de bajos ingresos de las naciones ricas están padeciendo muchas de las mismas dificultades. Y cita al Nobel de Economía Angus Deaton cuando señala que entre vivir en una aldea pobre de la India o en un suburbio de Milwaukee en un parque de caravanas no tiene claro dónde tendría una vida mejor.
La cuestión fundamental, señala Yunus, es la desigualdad creciente debida a la concentración incesante de riqueza, una amenaza para el progreso, la cohesión social yla propia democracia. Y esa concentración, advierte, es un proceso prácticamente inevitable del sistema actual. No porque los ricos sean unos malvados manipuladores sino porque el sistema opera en su favor. Una estructura que es una bomba de relojería que destruirá lo creado a lo largo de años: hay polarización social e ira.
Por eso propone admitir que la versión neoclásica del capitalismo no ofrece solución a los problemas a los que nos enfrentamos pese a haber producido avances tecnológicos asombrosos y acumulaciones deriqueza colosales... a costa deuna desigualdad enorme y los terribles problemas humanos derivados. El motor capitalista actual está produciendo más daños que soluciones y hay que rediseñarlo pieza a pieza. Apartir de su experiencia bancaria, cree que el rediseño consta de tres elementos básicos: las empresas sociales, compañías sin dividendos dedicadas a resolver problemas humanos como las que ha ido creando él, de modo que en el sistema haya empresas movidas por el interés propio y por el desinterés; el reconocimiento de que todos los seres humanos son emprendedores y no meros proveedores de mano de obra; y la re estructuración del sistema financiero para que sea eficiente para los que están más abajo. Endefinitiva, dice, un sistema que sirva de verdad a las necesidades de seres humanos reales y les de la oportunidad de realizar su potencial creativo en una época de tecnologías asombrosas y enorme riqueza.