El auge de las viviendas con amenities
Los servicios o amenities son cada vez más habituales en las promociones de obra nueva
Natàlia Bosch Vivir en un piso pero con algunos servicios comunitarios extra propios de una casa, como disfrutar de un jardín, de una piscina o incluso de un gimnasio, es una fórmula que, a pesar de tener más de medio siglo de vida, se mantiene en plena forma en Barcelona. Hasta el punto que, a día de hoy, muchos edificios de obra nueva o grandes rehabilitaciones incorporan estos servicios o ameniti
es. "Hemos notado que, desde hace unos cinco años, se han empezado a implantar actuaciones en este senti- do en edificios regios o en grandes rehabilitaciones en los barrios del centro más implantados, como Gràcia o L'Eixample, para incorporar una piscina en la azotea, una zona ajardinada en la manzana interior, un gimnasio...", sostiene Jorge Campreciós, director de Property Development de Engel & Völkers.
Un nuevo modelo según el tipo de uso Pero esta fórmula de éxito está cambiando, adaptándose a las nuevas necesidades de las generaciones actuales. "Lo que para una persona de 60 es prioritario, por ejemplo, disfrutar de unportero y seguridad privada, es probable que para un emprendedor treintañero sea irrelevante y prefiera invertir ese dinero en tener una sala polivalente para reuniones de trabajo, por ejemplo", apunta May Iglesias, responsable de Zona Alta de Lucas Fox Barcelona. En este sentido, Iglesias explica cómo las comunidades con zona ajardinada y piscina típicas del a zona alta, como Pedralb eso Tres Torres, se están rejuveneciendo gracias a este nuevo comprador. "Estas comunidades empezaron a gestarse en los años 60-70 y tuvieron un gran impacto en cómo se vivía la ciudad. Era un perfil de comprador que quería vivir en la ciudad pero con unos extras ycomodidades", explica Campreciós.
Pero esos propietarios se han hecho mayores, y muchos de esos servicios han dejado de usarse. Con la incorporación de este nuevo comprador, muchos de ellos de profesiones liberales y con horarios flexibles, todos estos servicios empiezan a recuperarse y a reinvertarse. "Se impone el concepto de pago por uso. Tengo una piscina, la uso .¿ Las a laquee rapara las reuniones de vecinos y que nadie usa? La transformamos en una sala polivalente para hacer pilates y entre varios vecinos pagamos los servicios de unpersonal
trainer", sostiene Iglesias. Este nuevo modelo que cambia el tipo de uso ha influido la planificación de las nuevas promociones, según Iglesias. "Se está viendo que quizás el comprador valora más tener una piscina, un jardín o un gimnasio en vez de, por ejemplo, destinar dos plantas aparking. Por eso cada vez es más habitual que las nuevas promociones incorporen este tipo de servicios extra, porque es lo que demanda el comprador". En este sentido, Campreciós explica, a modo de ejemplo, cómo en algunas promociones de obra nueva se están instalando ya cargadores para el coche eléctrico o se prevén zonas de aparcamiento para bicis, porque la movilidad en la ciudad está cambiando. Precisamente enrelación al parking, Iglesias matiza: "Si bienelcliente internacional enmuchos casos ni pregunta por él y sí por los servicios, el nacional aún prima la comodidad de tener el coche en la misma finca a los servicios ".
Pagar los servicios y mantenerlos ¿Yquépa saco nelp recio? Campreciós sostiene que la diferencia no es tan importante como podríamos pensar con relación a una promoción que no los tenga: "De media estaríamos hablando de entre un 5 y 10% más. En muchos casos, este tipo de ameniti
es se ofrecen como un extra porque ayudan a la comercialización de esa promoción". Y, en cuanto a los costes de mantenimiento, Iglesias sostiene que gracias a las nuevas tecnologías
ecofriendlyy de eficiencia energética, en las nuevas promociones noson tan eleva dos como antes :" Según el número de vecinos, pueden ser entre 200 y 500 €/mes. Lo que realmente dispara los costes es contratar servicios de seguridad las 24horasdel día". •
Si el extranjero prioriza los servicios al parking, al nacional le cuesta renunciar a la comodidaddetener el cocheenlafinca