La sombra de la guerra comercial se extiende

Hay diferencias de opinión entre los analistas sobre el tema del proteccionismo. Por un lado, hay quién minimiza tanto los efectos como el alcance de las subidas arancelarias lanzadas por Donald Trump. “El presidente tiene dos obsesiones, que son China y México. También tiene déficit comercial con Japón, pero allí no entra. Porque su gesticulación, en el fondo, tiene como último objetivo la instalación de fábricas extranjeras directamente en el territorio norteamericano, como ya practica desde hace tiempo Toyota”, explica Josep Soler de EFPA España. De hecho, los datos proporcionados por la Organización Mundial del Comercio indican que los intercambios siguen creciendo a un ritmo sostenido, un 3,9% este año y un 3,7% en el 2019.

En el otro frente, hay quién considera que todavía no hemos visto las consecuencias negativas del conflicto entre Washington y Pekín y que lo peor está todavía por llegar. Para Cailin Birch, analista global de la consultora Economist Intelligence Unit, “el problema es que el conflicto entre China y EE.UU. no da señales de terminar, porque estas dos potencias están comprometidas en una carrera para quién va a tener mayor influencia. Si la guerra comercial continúa, al final va a tener un impacto en la actividad de ambos países y de ahí se extenderá a la economía global, aunque un colapso financiero a gran escala no entra de momento en nuestras previsiones”. En contra de lo que creen algunos, Birch sostiene que hay que tomarse las salidas de tono del presidente estadounidense en serio. “Las amenazas de Trump son una estrategia real, porque Pekín representa el objetivo principal. Con toda probabilidad la administración seguirá con la política de aranceles en los próximos dos años para sacar ciertas concesiones”.

De acuerdo con la plataforma Global Trade Alert, sí parece que el proteccionismo cotice al alza. En lo que va de año ya se han introducido 11.719 medidas restrictivas del comercio, por tan sólo 4.501 liberalizadoras. El país más duro a la hora de levantar barreras fue EE.UU., con 1.658 medidas. El país más afectado y perjudicado está siendo China, que padece 5.199 barreras nuevas en lo que va de año. Estos países son los dos protagonistas.