Joven y dinámico
No es un SUV más. BMW demuestra con el X2 cómo seducir mediante la calidad y la precisión al volante
El atractivo X2 es la apuesta de BMW en uno de los segmentos del mercado de moda y que más crecen: el de los crossover o SUV compactos. La marca alemana no tenía hasta ahora un representante en una categoría donde Mercedes ha triunfado con su GLA y Audi con sus Q2 y Q3. El nuevo X2 es por tanto una respuesta contundente, acertada y que no defrauda en absoluto. Es, simplemente, lo que esperaban los clientes de la marca bávara.
Utiliza la misma plataforma que el X1 y el Mini Countryman, casi con sus mismas medidas. Con 4,36 metros de longitud, el X2 tiene un maletero muy aprovechable de 470 litros de capacidad, aunque el umbral de carga queda algo elevado. Respecto al BMW X1, es 8 centímetros más corto y 7,2 centímetros más bajo, diferencias que permiten disfrutar de un aspecto más atlético y de unas proporciones muy dinámicas. A su vez, pesa unos 50 kg menos y logra una mejor penetración aerodinámica. Estas dimensiones lo convierten en un vehículo polivalente, capaz de servir para el día a día, pero con el atractivo añadido de su excelente dinamismo en carretera y la posibilidad de circular fuera del asfalto gracias a su altura al suelo y a su eficaz tracción integral xDrive.
Estéticamente tiene una parte frontal muy llamativa, con grandes tomas de aire que ocupan casi toda la extensión del paragolpes frontal. Visto de perfil, la caída del techo en su mitad posterior la da un interesante aire de cupé. Ágil y divertido El X2 de la prueba, versión xDrive20d, tiene tracción inteligente integral y monta el motor diésel de 190 CV con el excelente cambio Steptronic, secuencial de 8 velocidades. El acabado MSport X, además, incluye llantas de 19 pulgadas, suspensión deportiva M más firme y rebajada y asien- tos de tela y Alcántara. Esta completa versión diésel también dispone de serie de Hill Descent Control. Asimismo, una tecnología innovadora disponible es un asistente de retenciones que ayuda al conductor a mantener el coche en el centro del carril cuando el tráfico produce paradas intermitentes en autopistas congestionadas.
El comportamiento en carretera es uno de sus puntos fuertes, con un tren de rodaje deportivo que permite poca inclinación de carrocería y facilita la entrada en curva. Es ágil y preciso, gracias a una dirección rápida propia de un potente GTI compacto.
Tacto deportivo
El motor 20d destaca por su suavidad de funcionamiento y capacidad de empuje; es realmente elástico y recupera muy bien en cualquier situación. El conjunto, por tanto, resulta sumamente agradable, gracias también al magnífico cambio Steptronic de 8 marchas. La gestión electrónica del cambio y los diferentes programas de conducción facilitan mucho las cosas al conductor. Es fácil encontrar el perfil más adecuado para cada situación. El tacto de conducción, en general, es deportivo, típicamente BMW, con un aplomo muy bueno sobre el asfalto.
Cabe destacar, finalmente, su equipamiento de seguridad con la tecnología Driving Assistant, que emplea varias cámaras, el asistente de mantenimiento de carril o el control de crucero adaptativo con asistente de circulación en atascos.