Exclusividad deportiva
Porsche estrena la octava generación de su modelo más carismático, el 911. Moderno y atemporal, ofrece más potencia y más equipamiento digital
Equipadas con la nueva generación de motores bóxer turbo, las versiones S alcanzan los 450 CV La utilización de inteligencia artificial permite responder a las nuevas exigencias del mundo digital
El 911 es uno de los automóviles más deseados. Su prestigio y su capacidad de atracción lo han situado como una referencia entre los modelos más deportivos y exclusivos del mercado. Su historia arrancó un 12 de septiembre de 1963, con la presentación en el Salón del automóvil de Frankfurt del 356, su antecesor.
Ahora, en su octava entrega, la firma alemana experimenta un importante avance en todos los apartados y, sobre todo, es más potente, más rápido y digital. Mantiene un indiscutible ADN Porsche en cuestiones de diseño, con un aspecto más musculoso basado en unos pasos de ruedas considerablemente más anchos que permiten alojar llantas y ruedas de 20 pulgadas delante y 21 pulgadas detrás. La zaga del vehículo tiene ahora la misma anchura en todas las versiones y, en el frontal, la carrocería es 45 milímetros más ancha.
Otras novedades son unos tiradores de puertas eléctricos que quedan enrasados con la carrocería, nuevos faros de led y un capó con pronunciado rebaje que recuerda las primeras generaciones del modelo. En la trasera destaca la presencia de un ancho spoiler ajustable y de una tira continua de luces. Además, las piezas del frontal y la trasera están fabricadas en aluminio.
Inspiración clásica El interior es completamente nuevo. Se caracteriza por líneas de salpicadero rectas y bien definidas, combinadas con una ins-