De la oficina al circuito
Para puristas de la marca, el M2 Competition es un cupé radical con un solo objetivo: la eficacia dinámica
El M2 Competition no defraudará a nadie que priorice las prestaciones por encima de cualquier otra consideración. Y más si tiene la suerte de poder pagar lo que cuesta esta versión con el extraordinario cambio M DCT de siete velocidades. Atrás ha quedado el anterior M2Coupéde370CV, casi obsoleto de un plumazo. Más radical y tecnológico, el M2Competition da un salto bestial al emplear el motor de seis cilindros con doble turbo, el mismo del M3 y el M4, que llega a los 410 CV. Y en un coche ligero y compacto, esta combinación es dinamita pura.
Nueva referencia en prestaciones y también en agilidad, alcanza los 100 km/h en 4,2 segundos en el caso de equipar la caja de cambios de doble embrague MDCTde esta versión (4,4 segundos con cambio manual). La velocidad máxima es de 250 km/h, que puede llegar a 280 km/h con el paquete opcional M Driver que ofrece el fabricante. El consumo medio es de 9 litros con el cambio de doble embrague, aunque se dispara bastante si lo conducimos en circuito.
Como es lógico, este M2 tiene una puesta a punto especial, específica. Así, el aumento de prestaciones ha obligado a modificar la suspensión delantera con una barra de alta precisión fabricada en carbono entre las torretas delanteras. La dirección asistida electromecánica, el diferencial activo My el sistema de control dinámico de dirección DSC también han sido ajustados. El sistema de escape presenta un nuevo silenciador y cuatro salidas acabadas en cromo negro. El sonido puede ajustarse a través del modo M Dynamic Performance Control.
El M2Competition, como no podía ser de otra manera, también es especial por su presentación exterior, con una parrilla más grande y acabada en color negro y un faldón delantero diseñado para mejorar la refrigeración del motor turboalimentado. Loscuatroescapestraseros, los retrovisores de doble brazo y el anagrama M Competition lo distinguen del resto de la gama.
MÁS
VALORACIÓN
Al ponerlo en marcha, el M2 se hacenotarconunsonidoronco, resonante, preludio de un conjunto de sensaciones altamente estimulantes. La suspensión es dura, seca, y la dirección, más que directa, inmediata. Con los modos M1 o M2 activados, la aceleración es muy contundente, con unapisada en seco firme y muy precisa. Uno de los aspectos que más impresionan, si el asfalto es bueno, es la capacidad detracción del tren trasero. Deeste modo, salir acelerando de curvas cerradas es una experiencia realmente fascinante.
Como es tradición en los modelos M, el M2Competition incorpora en el puesto de conducción selectores enlaconsolaquepermiten modificar el funcionamiento de motor y dirección y las funciones Drivelogic del cambio secuencial M DCT. Las múltiples configuraciones, a gusto del conductor, pueden memorizarse a través de los botones M1 y M2 del volante para acceder a ellas de forma rápida y sencilla. Especial también en equipamiento, incluye de serie un botón rojo para arrancar o parar el motor, faros led adaptativos y control de distancia de aparcamiento delantero y trasero (PDC). Especial atención requiere el capítulo frenos, mejorados para la ocasión con discos de 400 mm(tren delantero) y 380 mm (tren trasero). Las llantas de19pulgadas, conel exclusivo diseño de radios en forma de Y, también forman parte del equipo de serie. Opcionalmente, BMW ofrece unos magníficos asientos delanteros deportivos, tipo baquet, derivados de la competición, con reposacabezas integrados en el respaldo con el distintivo M2 iluminado.