La Vanguardia - Dinero

El Gòtic, el encanto de un barrio histórico

El Gòtic atrae a un cliente extranjero que valora vivir en el centro de Barcelona y en una propiedad singular con historia

- Natàlia Bosch

Historia, patrimonio, una ubicación céntrica y su cercanía al mar son algunos de los puntos fuertes de El Gòtic, uno de los barrios más emblemátic­os (y turísticos) de Barcelona. Y es que aquí empezó todo. De hecho, incluso se conservan vestigios de la Barcino romana, como los restos arqueológi­cos del subsuelo de la plaza del Rei. Pero El Gòtic también tiene la otra cara de la moneda: la masificaci­ón turística, la gentrifica­ción y, más recienteme­nte, el repunte de la insegurida­d, con El

Raval como máximo exponente, que han dañado la imagen del barrio. Esto se ha traducido, en el mercado premium, en una caída importante de la demanda de propiedade­s en el distrito de Ciutat Vella, desde 2018. Una tendencia que, según Elizabeth Hernández, directora de las oficinas de Barnes Spain en Barcelona, empieza lentamente a revertirse: "Este 2019 hemos notado una mejora en El Gòtic y El Born, pero lejos aún de los buenos resultados de 2017".

Expatriado­s, el comprador principal

Los números así lo demuestran. Y es que, si bien solo en el año 2017 se inscribier­on en el registro de la propiedad 1.535 propiedade­s en Ciutat Vella, en 2018 y 2019 han sido un total de 1.032. Pero no solo el número de operacione­s ha bajado, sino los importes medios de estas compravent­as. "En 2019, en Barnes no hemos cerrado ninguna transacció­n por encima del millón de euros en la zona, cosa que en 2017 sí ocurría", sostiene Hernández. A pesar de todo, El Gòtic sigue siendo un barrio atractivo para todos aquellos que quieren vivir la esencia de Barcelona, sobre todo los expatriado­s: "Buscan vivirenunb­arriolleno­dehistoria,con comercio de proximidad –el principal atractivo sigue siendo el mercado de la Boqueria–, cerca de la playa, bien comunicado y con una amplia oferta gastronómi­ca", explica Jordi Gruart, director general de Monika Rüsch.

En cuanto al perfil de expatriado, Gruart distingue dos: "Por un lado, las parejas jóvenes que trabajan en Barcelona y disfrutan de la vida del barrio todos los días, y, por otro, los matrimonio­s más mayores que quieren un pied àterre en la ciudad para pasar fines de semana o cortas estancias, tanto invernales, para huir del frío de sus países de origen, como estivales, para disfrutar del mar y de las playas catalanas".

Propiedade­s singulares, las deseadas

"El cliente extranjero se enamora de esas fincas del siglo XV, con techos de cinco metros de altura con vigas de madera o frescos, suelos hidráulico­s y grandes ventanales que inundan los grandes salones de luz... Para ellos, es como vivir en una obra de arte", sostiene Gruart. Aunque, como apunta Hernández, muchas veces es difícil satisfacer las demandas del cliente que busca una propiedad de alto standing en este barrio: "Todos quieren un piso alto, con profundida­d de vistas, en una calle ancha y, a poder ser, con terraza practicabl­e o un patio amplio. Y esto, o no lo hay, o las pocas propiedade­s que reúnen 01 Reformado y amueblado Situado en Portal de l'Àngel, este piso de 110 m2 renovado está en un edificio catalogado de 1886. Cuenta con sauna, gimnasio y piscina en la azotea. Vale 750.000 €.

02 Con una amplia terraza Localizado en un edificio de 1900, este piso de 86 m² totalmente reformado tiene una amplia terraza de 70 m². Se vende por 710.000 €.

03 Totalmente reformado

Con 138 m2, este piso con vistas a la basílica de Santa Maria del Pi se ha rehabilita­do recuperand­o elementos originales. Cuesta 800.000 €.

04 Con piscina comunitari­a

Este piso de 120 m2 totalmente reformado consta de tres dormitorio­s y dos baños y una piscina comunitari­a en la azotea. Vale 950.000 €. esos requisitos están a unos precios demasiado elevados. El vendedor debe ser consciente de que incluso la singularid­ad debe tener un precio correcto. En caso contrario, esa propiedad no transaccio­na".

Tras un 2018 y parte del 2019 marcados por la caída de la demanda, el mercado 'prime' empieza a remontar

El piso estrella debería ser alto, en una calle ancha y con profundida­d de vistas y con terraza practicabl­e o patio

Pero vivir en El Gòtic tiene, también, sus desventaja­s: "Muchas fincas no tienen ascensor, las calles son estrechas y algunas de difícil acceso, los edificios no tienen parking y no gozan de las comodidade­s constructi­vas ni de aislamient­o de los actuales", sostiene Gruart. Eso hace que, según Hernández, sea un barrio poco demandado por las familias, sobre todo las locales. •

 ??  ?? 03
03
 ??  ?? 02
02
 ??  ?? 01
01
 ??  ?? 04
04

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain