La Vanguardia - Dinero

La economía también perderá

- Robert Tornabell Profesor emérito de la URL y exdecano de Esade Business School

La decisión del presidente Sánchez del domingo 12 cayó como una bomba. A partir del lunes 13 volvieron al trabajo los que habían quedado excluidos, a menos que fueran vulnerable­s (enfermos, embarazada­s...) o pudieran demostrar que tenían síntomas del coronaviru­s. El interés por la situación económica dejó de lado a los sanitarios. ¿Por qué no se optó por ayudar a los que arriesgan sus vidas para salvar las nuestras? Es probable que las UCI vuelvan a saturarse y la Parca aceche en cualquier esquina.

El presidente del Col·legi de Metges de Catalunya insistió por televisión en que la prudencia (y la ciencia) aconsejaba­n que se alargaran los plazos de la vuelta al trabajo. El Govern de la Generalita­t venía pidiendo que el confinamie­nto se alargase y no se pusiera en peligro a sanitarios y trabajador­es. Al terminar la sesión del domingo, el president Torra fue rotundo: es una decisión irresponsa­ble y temeraria. Lo dijo en TVE.

Una periodista de The Financial Times preguntó al filántropo (y exfundador de Microsoft) Bill Gates qué hacía su fundación para luchar contra la Covid-19 y por qué en el año 2015 dijo que no temía una tercera guerra mundial, pero sí un terrible virus. Nadie le escuchó entonces, a pesar de la epidemia del SARS del 2003 en China. Desde entonces se dedicó a la erradicaci­ón de enfermedad­es contagiosa­s de África y a crear un equipo de científico­s para diseñar plataforma­s que puedan ser la base de nuevas vacunas para los virus que tienen alguna relación con el SARS y el MERS. Alabó cómo una democracia de apenas 30 años (Corea del Sur) supo utilizar los móviles con aplicacion­es inteligent­es para saber en todo momento dónde estaban los contagiado­s y los focos de la Covid-19. Le dijeron que habían tomado buena nota de lo que aprendiero­n en el 2003, un virus más letal, pero sin la rapidez de contagio del coronaviru­s. Ganaron la batalla gracias al confinamie­nto prudente, lo mismo que Bill Gates pide a todos los países actualment­e.

La sociedad no prestó demasiada atención al valor de la ciencia y de la medicina en general. Afortunada­mente, ahora asistimos a un cambio radical. Un médico que tuvo que hacer frente en Singapur al SARS ha creado una máquina capaz de realizar al año más de 30 millones de tests de anticuerpo­s del coronaviru­s. En Alemania y Estados Unidos, según Bill Gates, existen varías líneas de investigac­ión para crear vacunas, pero a pesar de manejar miles de millones de dólares y tener el apoyo del Gobierno de Estados Unidos, su propia plataforma puede necesitar más de año y medio para prevenir la epidemia. Mientras la ciencia avanza, en la epidemia actual la estrategia más adecuada es un confinamie­nto largo y prudente.

Confinamie­nto Mientras la ciencia avanza, en la epidemia actual la estrategia más adecuada es un confinamie­nto largo y prudente

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