Tecnología en cada gota de agua
La digitalización y los nuevos sistemas de microirrigación en la agricultura son críticos para sobreponerse a la preocupante situación de estrés hídrico en muchos países
“Olvidamos que el ciclo del agua y el ciclo de la vida son uno mismo”. Agua y vida. La frase cobra todo el sentido con la voz y el corazón de quien la pronuncia: Jacques Cousteau. Pocas personas como el francés, nacido en tierra pero vivido en el mar, han contribuido tanto a la divulgación y concienciación sobre el agua, su riqueza y su valor. Su vida fue el agua. El agua es vida. Desde nuestros orígenes. El agua ha sido testigo y protagonista del avance de la historia. El agua es salud. Higiene. Energía. Motor económico. Y recreación. El agua es un derecho, y esencial para la vida. El agua es universal.
Y escasa. La mitad de los 7 billones de habitantes del planeta no dispone del acceso adecuado al agua. Lo denuncia Naciones Unidas: 4.200 millones de personas no cuenta con servicios de saneamientos seguros; 3.000 millones apenas pueden lavarse las manos con mínimas garantías y 2.200 millones carece de agua potable. Unicef eleva a más de 300.000 las muertes de niños por enfermedades diarreicas al año; en adultos, los fallecimientos por problemas de salud derivados de la escasez o mala calidad del agua se cuentan por millones.
El agua es para todos, pero no llega igual para todos. En España, el 97% de la población tiene acceso a agua potable. Ocurre lo mismo en Dinamarca, o en Japón. En Canadá, se alcanza el 99%. A diferencia de muchos países de África subsahariana, principalmente, o regiones de Sudamérica y Oceanía, donde la cobertura no supera el 75%. En lo que a calidad del agua se refiere, las diferencias entre países se dispara aún más.
El reto del agua es mayúsculo. La presión demográfica que vivirá, previsiblemente, el planeta, con un incremento del 30% la población en el 2050 hasta alcanzar los 10 billones de habitantes, genera una necesidad imprescindible de conciliar la demanda de todas –fundamental– las comunidades con los recursos hídricos existentes. Esta presión demográfica llegará, si nada cambia, acompañada de los efectos derivados de la crisis climática, que afecta sobremanera a la disponibilidad del agua.
El crecimiento de la población no será igual al crecimiento de la demanda de alimentos, que se estima en un 50%. Así, pues, si crece la población un 30% pero la demanda lo hace en un 50%, ¿cómo lograr el equilibrio? ¿Qué papel puede jugar el agua? Si en un mundo superpoblado la agricultura es una actividad crítica, pero aumenta la superficie de tierra fértil a la
Presencia en 80 países
Matholding cuenta con fábricas en España, Estados Unidos e Israel, y filiales en 12 países. España y norte de África aportan el 40% del volumen del negocio, seguido de Estados Unidos e India. vez que disminuye la capacidad de agua disponible, ¿cómo vivirán millones de personas?
La respuesta está en la gestión eficiente de cada gota de agua en un contexto de enorme estrés hídrico del planeta. Esto es, cuando la demanda de agua es superior a la cantidad disponible en un período de tiempo determinado. Y esta circunstancia no entiende de zonas geográficas ni de desarrollo económico. En un ranking liderado por Qatar, Líbano e Israel, España se sitúa en el puesto 28. Los recursos hídricos disminuyen pero la población necesita más.
Así, compromiso y tecnología se conjugan para aportar soluciones en el sector de la agricultura, base de la economía de muchos países del mundo. Hasta en 50 regiones la agricultura supone más del 20% del PIB nacional. En Chad, Guinea Bissau o Sierra Leona, el porcentaje supera el 50%. En países como India, la mitad de la población trabaja en la agricultura.
“El riego de precisión es una de las soluciones para modernizar y optimizar las infraestructuras de riego, y así reducir de forma dramática el uso de agua”, explica Jordi Crespi, director general de Dorot Control Valves, filial del grupo industrial Matholding, dedicado mayoritariamente a la protección de cultivos, eficiencia en riego y tratamiento y conducción de agua.
Crespi destaca los beneficios económicos de este sistema porque “incrementa tanto la productividad del cultivo como la rentabilidad por hectárea”, y los más intrínsecos a la calidad de la tierra “ya que tanto el agua como los fitosanitarios y nutrientes alcanzan la raíz de la planta”.
Matholding ha modernizado desde los 80 infraestructuras de riego con la aplicación de tecnologías disruptivas importadas des de Israel vinculadas al gota a gota. Precisamente en Israel, uno de los países que más padece el estrés hídrico y que ha impulsado a nivel público-privado una potente inversión en innovación, Matholding ha adquirido la empresa ARI Optimal Flow Solutions dentro de su plan estratégico para impulsar la división
“El riego de precisión es una de las soluciones para reducir de forma dramática el uso de agua en el cultivo”
El grupo Matholding ha impulsado su división de agua para desarrollar tecnologías disruptivas y la digitalización
de aguas. “En el 2013 tomamos la decisión de controlar la tecnología y apostar por la digitalización, como ejes para mantener y reforzar nuestro posicionamiento”, asegura Pau Relat, consejero delegado de Matholding, que con esta operación, incide, “nos permite ponernos a la cabeza en gestión eficiente del agua”.
A nivel tecnológico, el grupo ha focalizado su interés en soluciones de alto valor añadido en la conducción, tratamiento y monitorización de agua. “En los últimos años hemos aprovechado las oportunidades que también Israel brinda en la digitalización y hemos incorporado en nuestros equipos profesionales del entorno start- up tecnológicas”, apunta Relat. Tecnología y compromiso para hacer que cada gota cuente. Para que cada gota sea vida.