Las prisas, malas consejeras
El confinamiento acrecienta el deseo de comprar casa, pero saltarse pasos puede salir muy caro
Otra habitación. Más luz. Una terraza. Jardín... Tras meses de confinamiento cambiar de casa es un deseo que ha pasado por la cabeza de muchos. Las búsquedas se han disparado en los portales inmobiliarios. Los tipos de interés en mínimos invitan a la aventura. El temor a un parón del mercado ha empujado a una bajada media de los precios del 10%, es otro aliciente. Los malos augurios económicos, el miedo a perder el empleo, en cambio, frenan la decisión. En medio, la incertidumbre sobre si habrá o no un nuevo confinamiento, con prisas o sin ellas, cualquier comprador debe recordar que el proceso de adquirir una vivienda bebe estar presidido por la serenidad y la precaución. En este caso, dejarse llevar por el impulso puede costar muy caro. “La decisión final siempre va a ser una cuestión emocional. Pero para que esa emoción no se convierta en drama el proceso debe comenzar asegurándose de con qué financiación se cuenta para abordar la compra y la capacidad de pago”, advierte Constanza Maya, directora de operaciones y expansión para España, Portugal y Andorra de Engel & Völkers.
En esas cuentas preliminares debe tenerse muy presente que el precio que aparece en el anuncio de venta es solo una parte de lo que habrá que pagar. “Hay que echar bien las cuentas. Además de la hipoteca hay gastos de notario, tasación registro y además, hay que sumar el pago de los impuestos correspondientes, que varían según se trate de una vivienda nueva o usada que paga el Impuesto de Actos Jurídicos Documentados o nueva que paga IVA, también debe tenerse presente el IBI, el coste de la comunidad y posibles derramas...”, recuerda Anäis López, directora de comunicación de Fotocasa.
Con toda esta información actualizada, lo recomendable es hacer una ronda por distintas entidades financieras para tantear las posibilidades de conseguir una hipoteca y sus condiciones. Con los asuntos financieros bajo control, es el momento de iniciar la búsqueda. El tipo de vivienda es tan importante como lo que le rodea. “Ahora la tendencia es irse a las afueras de la ciudad, pero está por ver si eso será así en el futuro”, advierte Constanza Maza. Analizar con detalle la futura
El nuevo propietario debe inscribir su titularidad en el registro para evitar problemas