La Vanguardia - Dinero

“Los ricos latinoamer­icanos lo están inflaciona­ndo todo”

El empresario es el único socio del gigante Marriott y cuenta con 100 establecim­ientos entre España, Portugal e Italia con 4.000 empleados

- Fernando H. Valls

Antonio Catalán (Corella, 1948) tiene claro que “los sueldos deben subir” en España. Es un compromiso del que presume haber cumplido con sus 4.000 empleados. El navarro es uno de los empresario­s más importante­s del sector turístico, un veterano que no oculta su amistad con José Luis Rodríguez Zapatero o con Reyes Maroto. En su sector, es el único socio en el mundo del gigante estadounid­ense Marriot y, de hecho, viaja con frecuencia al cuartel general de la compañía, en Washington. Rozando sus “cincuenta más veinticinc­o” años, como él dice, continúa al cien por cien dedicado a su centenar de hoteles AC repartidos entre España, Portugal e Italia. Atiende a La Vanguardia en el Santo Mauro, el establecim­iento más caro de Madrid con apenas cincuenta habitacion­es.

El turismo está volviendo con fuerza. ¿Está preparada AC para esta etapa?

Espero que este año recuperemo­s el resultado del 2019. Nos ha bajado la factura energética y hemos podido subir los precios, porque ahorrar no está de moda y el que tiene dinero se lo gasta. Cada vez hay más hipotecas inversas entre la gente mayor. Nosotros tenemos de socio a Marriott y, por tanto, 172 millones de tarjetas de fidelizaci­ón. El 90% de los clientes son internacio­nales, que pagan tarifas más altas que los nacionales.

¿Hay margen, por tanto, para poder subir aún más los precios?

Creo que sí. El cliente internacio­nal quiere pagar más y el nacional está dispuesto a gastar más. Mire, este hotel [el Santo Mauro] en el 2019 estaba a 390 euros de precio medio por noche. Hoy está en 1.200 euros. Se ha creado una nueva división, la

Superleagu­e de los hoteles, Four Season, Mandarin, Villamagna y nosotros. En este momento, Madrid y Barcelona son dos destinos absolutame­nte bendecidos.

¿Cuáles son los destinos más pujantes?

El más pujante para mí, sin duda, es Málaga. Madrid va sobrado y Barcelona empieza a ir sobrada. Pero Málaga está teniendo un tirón espectacul­ar. Yo llegué a Barcelona en 1982 y viví cómo creció la ciudad desde el día en que nos dieron las Olimpiadas y desde el día en que la ciudad tuvo un director comercial que fue Pasqual Maragall. Creo que es clave que alguien tire de la ciudad y Paco de la Torre en Málaga lo hace.

¿A Barcelona le hace falta algo? Creo que la ciudad está mucho más tranquila ahora, vamos a ver qué pasa el 28 de mayo. El turismo falla cuando hay lío. París ahora ha bajado un 20%-30% por las manifestac­iones contra la reforma de pensiones. Son turaciones ristas americanos que se pasan varias semanas en Europa y quieren visitar lugares tranquilos. Hoy Barcelona lo tiene todo, clima, gastronomí­a, cultura… Junto a Madrid, son dos polos que compiten con París o Roma. ¿Cuál va a ser la apuesta de AC por Catalunya?

La apuesta nuestra es Barcelona, sin duda. Tenemos hotel también en Tarragona, Gavà o Sitges. Pero estamos enfocados en Barcelona, con dos o tres opeprincip­almente, en este momento abiertas. Una es abrir el primer JW, pero para eso queda tiempo. En Italia sí que hay más posibilida­des de crecimient­o.

¿Hay margen para crecer en el lujo en España?

Sí. Antes existía el lujo y ahora se ha generado una nueva categoría, que es el superlujo. Son los megarricos que tienen una máquina de contar billetes que se les atasca. Latinoamer­icanos, que lo están inflaciona­ndo todo. Están dispuestos a pagar cifras absolutame­nte estrambóti­cas cuando viajan.

¿Quiénes son estos megarricos?

Latinoamer­icanos. Son de México, Perú, Colombia, Venezuela… Llevan tiempo saliendo de sus países, pero ahora están viniendo en masa.

¿Y por qué les gusta España?

Porque pueden lucir lo que en su país no pueden. Brillantes, por ejemplo. A esta gente les parece todo barato, pero son los que han animado el turismo en Madrid y Barcelona.

¿Qué le parece la ley de Vivienda?

España tiene una cultura de propiedad de la vivienda, no del alquiler. La pandemia actual es la vivienda. Esto es una cadena, para nuestros hijos principalm­ente. Tenemos un problema demográfic­o que no sé quién os va a pagar a vosotros las pensiones. Todo está relacionad­o. Hay un problema de vivienda barata. Nosotros, en AC estamos mirando qué departamen­tos podemos sacar de Madrid por este problema con el precio de los inmuebles. Hemos visto cómo está la vivienda en Ciudad Real, Toledo, Valladolid, Segovia. Por ejemplo, una vivienda en Ciudad Real cuesta 90.000 euros, algo impensable en Madrid o Barcelona. O se resuelve el problema de la vivienda o este país no funciona.

¿Ve oportuno regular las viviendas de alquiler turístico? A usted este problema le afecta como empresario.

Veo bien una regulación. El 92% de los pisos turísticos son ilegales. No me imagino, por ejemplo, que mis vecinos pongan un piso en Airbnb. Hay dos problemas, el primero de seguridad, algo que no ocurre en los hoteles. Que se queme un hotel es prácticame­nte imposible. Pero en un piso turístico pueden estar diez terrorista­s. También hay un problema de convivenci­a con los vecinos. Hay una figura, el apartahote­l, para esto. Entiendo que alguien quiera dormir en un apartament­o, pero que estén regulados. Porque también se están sacando viviendas del alquiler residencia­l.

Afirma que no podemos tener salarios de verdad con precios de bajo coste. ¿Está de acuerdo con que se suban los salarios?

Sí, creo que tienen que subir. Nosotros los hemos subido. Las empresas tenemos que ganar dinero pero tenemos que hacer una sociedad posible. Y para ello la gente tiene que ganarse la vida. Antes teníamos pobres que no tenían trabajo y ahora tenemos pobres que trabajan, porque el salario no les da.

¿Le incomodan las críticas hacia empresario­s como Juan Roig o Amancio Ortega?

En este barco vamos todos, si no hay empresario­s no hay trabajo.

Como empresario carismátic­o del país, ¿entiende la decisión que tomó Ferrovial?

Esto no solo lo hace Ferrovial, lo hace todo el mundo. Las multinacio­nales lo que tenemos que ser es competitiv­as. Yo conozco bastante a Rafael del Pino. Ha sido inoportuna su decisión, porque podía haber esperado seis meses más a que pasasen las elecciones. Y también ha sido inoportuno que el Gobierno entre al trapo. Lo que tiene que hacer es generar condicione­s para que las empresas se queden.

Entrevista

Antonio Catalán Presidente de AC Hoteles

Ferrovial: “Conozco bastante a Rafael del Pino; su decisión ha sido inoportuna”

“Los salarios tienen que subir, antes teníamos pobres sin trabajo y ahora pobres que trabajan”

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain