De depuradora a ecofactoría: un paso más en la regeneración de agua
Aigües de Barcelona está transformando las estaciones depuradoras ya existentes en centros autosuficientes que convierten los residuos en productos
La emergencia hídrica actual ha multiplicado la necesidad de agua regenerada en el área metropolitana de Barcelona. Uno de cada cuatro litros proviene hoy en día de la reutilización, un proceso en el cual las estaciones depuradoras de aguas residuales, cuya función es mitigar el impacto humano derivado de la actividad en las ciudades, tienen un rol determinante. Aigües de Barcelona tiene como objetivo la transformación integral de estas depuradoras tradicionales para convertirlas en ecofactorías, es decir, en fábricas energéticamente autosuficientes y que, además, convierten los residuos de la depuración del agua en productos útiles para la agricultura, la construcción o la movilidad.
La transformación de depuradora en ecofactoría es un salto exponencial en el reaprovechamiento de los recursos, especialmente en cuanto a la reutilización de los residuos. En el año 2023, la compañía puso en valor el 100% de los lodos que se generan en las depuradoras, un material rico en materia orgánica. Un 65% se utilizó para hacer compost, un 31% se empleó directamente como fertilizante y el 3% restante para hacer biogás y secado térmico. La compañía aprovecha energéticamente el biogás producido en las ecofactorías.
Además, Aigües de Barcelona tiene en marcha el proyecto Life Nimbus, cofinanciado por el programa LIFE de la Unión Europea, y en colaboración con Cetaqua, la Universitat Autònoma de Barcelona y TMB, para alimentar con biometano extraído a partir del biogás de la ecofactoría del Baix Llobregat un autobús público del área metropolitana de Barcelona.
Simple y llanamente, se trata de la aplicación estricta de la economía circular. Una ecofactoría es un centro autosuficiente, que obtiene la electricidad que necesita de fuentes renovables, que genera un impacto ambiental positivo y que aporta valor compartido a la sociedad.
Hacia una regeneración del 100% Aigües de Barcelona ve claro el camino para reforzar la resiliencia de un área metropolitana donde cada vez más estudios alertan de que, en el futuro próximo, serán frecuentes los episodios de sequía extrema como el actual. Es necesario extender la regeneración de agua hasta el 100%, en un sistema que regenere en un ciclo continuo. Un litro de agua obtenida de este modo reduce a la mitad la huella de CO2 y necesita solo un tercio de energía que un litro de agua proveniente de la desalinización. La de las ecofactorías es un agua generada en el mismo lugar donde es necesaria para el consumo y, por lo tanto, no hay que transportarla. La utilización de agua regenerada permite, además, liberar recurso de las fuentes naturales de agua (ríos y acuíferos) mejorando su cantidad y calidad.
El círculo virtuoso de las ecofactorías no acaba aquí: la del Baix Llobregat ya está bombeando agua regenerada aguas arriba hasta Molins de Rei. Esta misma agua es recogida en la planta potabilizadora de Sant Joan Despí, aguas abajo, para convertirla en agua potable. Un ciclo en continuo de regeneración del agua, un recurso que ya es escaso en todo el planeta y que en el área metropolitana de Barcelona será cada vez más limitado.
Algunas magnitudes
Durante el año pasado, de los casi 240 hectómetros cúbicos de agua que se depuraron en la región metropolitana, se regeneraron 57,9 hectómetros cúbicos, el equivalente al consumo de agua anual de un millón y medio de personas. La gran mayoría de esta agua, cuatro de cada cinco litros, se destinó a usos ambientales como, por ejemplo, agua prepotable o el mantenimiento del caudal ecológico de los ríos. La parte restante del agua regenerada se destinó al riego agrícola y a usos urbanos.
Aun así, estas cifras todavía quedan lejos de los 130 hectómetros cúbicos anuales de agua regenerada que serían necesarios, según las proyecciones de varias instituciones, en el área metropolitana de Barcelona para hacer frente al déficit hídrico estructural. Administraciones y empresas, pongámonos a trabajar.
Es necesario extender la regeneración de agua hasta el 100%, en un ciclo que avance de forma permanente