La medicina personalizada reduce costes y ofrece más calidad de vida
Un test genético permite predecir si la quimioterapia es el tratamiento a seguir en determinados casos de cáncer de mama
El análisis de la actividad de miles de genes, conocido como análisis genómico, brinda nuevos datos a los oncólogos sobre un cáncer específico y los beneficios que aportan las diferentes terapias. Entre estos análisis se encuentra el test de diagnóstico Oncotype DX para cáncer de mama en estadios tempranos, la primera prueba genómica que por medio de un “Recurrence Score” (RS) –o índice de recurrencia– cuantifica la probabilidad de reaparición de un tumor a los diez años de extirparse y de si es beneficioso para la paciente realizar un tratamiento con quimioterapia. Los resultados obtenidos de cuatro estudios de impacto en la decisión terapéutica realizados en Europa recientemente (España, Francia, Alemania y Reino Unido) –presentados el pasado miércoles en el Congreso de Oncología de St. Gallen, celebrado en Zúrich–, demuestran que, antes de realizar el test Oncotype DX, en un 45% de los 527 casos analizados se recomendaba a las pacientes un tratamiento de quimioterapia y hormonoterapia, mientras que en el 55% de los casos solo hormonoterapia.
“Después de conocer el resultado de la prueba, hay un cambio en la decisión terapéutica en el 31,9% de los casos y, globalmente, hubo una reducción del uso de quimioterapia del 45,4 al 33,6%”, explica el Dr. Joan Albanell, jefe del Servicio de Oncología del Hospital del Mar (Barcelona) y líder del estudio español.
En su encuentro con la prensa, el Dr. Albanell, destaca que “este test es de gran ayuda en la toma de decisiones sobre el tratamiento en pacientes con carcinoma ductal in situ tratadas con cirugía, con o sin tratamiento hormonal, y los resultados de los estudios realizados son muy similares en todos los países analizados”.
Albanell especificó que las mujeres a las que se plantea el test son pacientes con diagnóstico precoz de cáncer de mama con variante hormonal, HER2 negativo y ganglios negativos, que una vez extirpado el tumor se someten a una terapia hormonal. “A continuación, el oncólogo debe valorar si recetar un tratamiento de quimioterapia, con la toxicidad y otros efectos secundarios que conlleva, o no”. La significación del primer test multigénico en cáncer de mama radica en su capacidad de predecir los beneficios de la quimioterapia a partir de analizar 21 genes presentes en el tumor.
La prueba –de la firma americana Genomic Health (en España representada por Palex Medical)– tiene un coste de 3.200 euros y se utiliza de forma habitual en EE.UU. desde 2007. En nuestro país sólo cuatro comunidades la ofrecen en hospitales públicos: Catalunya, País Vasco, Madrid y Valencia, “aunque en casi todas las comunidades se han iniciado valoraciones, –remarca Lluïsa Arbat, responsable de Oncología de Palex Medical–, pero no podemos hablar de equidad”. La consultora científica de la firma, Iris Faull, añade que la prueba supone el ahorro de unos 770 euros por paciente, “contando que se realiza el test”.
“Debemos evitar la quimioterapia en aquellas mujeres en las que el beneficio previsto es mínimo o inexistente, tanto por la toxicidad y los efectos asociados, inaceptables si ésta no es necesaria, como por el coste del tratamiento”, insiste el investigador, quien concluye: “El valor de la medicina personalizada es importante desde el punto de vista económico y de calidad de vida del paciente”.