Crece un 30% la brecha entre los más ricos y los más pobres
La renta per cápita ha bajado hasta niveles del 2001
Mientras la crisis no da señales siquiera de haber tocado fondo, los datos sobre su coste social son cada vez más alarmantes. Las conclusiones del informe Foessa del 2013, presentado ayer, alertaron de cómo ha aumentado la brecha que separa a los más pobres de los más ricos en España. Así, entre el 2007 y el 2012, la diferencia que hay entre la quinta parte de la población con mayor riqueza del país frente a la otra quinta parte más desfavorecida, lejos de acortarse, ha aumentado casi un 30%.
El secretario general de Cáritas, Sebastián Mora, advirtió de que este aumento de la desigualdad social “ya nos muestra una sociedad fracturada”. El informe recalca el descenso de la renta per cápita a niveles similares a los del 2001 –en términos de capacidad adquisitiva–. “Desde el 2007, la renta media ha caído un 4% mientras que los precios se han incrementado en un 10%”, explicó Francisco Lorenzo, coordinador del equipo de estudios del informe Foessa. Para las rentas más bajas, el descenso de los ingresos se ha dado a un ritmo del 5% anual desde el 2006.
Con el fin de dar idea de la extensión e intensidad de las dificultades por las que está pasando buena parte de la población, Mora destacó que el 41,6% de las familias con tres hijos está bajo el umbral de la pobreza y un 16% de este tipo de hogares padece pobreza severa. La tasa de pobreza y/o exclusión social de la población española ha subido casi cuatro puntos en los últimos cuatro años, hasta alcanzar el 26,8%. También se mostraron especialmente preocupados por el avance de la pobreza severa (aquellos que están por debajo del 30% de la renta mediana en España), ya que consideran que está siendo “eclipsada” por el aumento de colectivos que hasta hace unos años no tenían problemas para pagar la vivienda, hacer frente a un gasto inesperado, llegar a final de mes... “Los que eran pobres antes de la crisis se están haciendo invisibles”, aseveró el responsable de Cáritas.
Mora y Lorenzo criticaron que esta difícil situación coincida con el recorte de las políticas de protección social, las redistributivas y las asistenciales. Sobre las medidas de ajuste aprobadas por las distintas administraciones, el secretario general de Cáritas señaló que “tomadas de una en una, hasta pueden ser razonables; pero en su conjunto, hacen que la vida sea muy difícil para mucha gente”. Si en el 2010 la cobertura de las prestaciones por desempleo llegaba al 78,4% de los parados, dos años después ha bajado hasta el 66%.
El secretario general de Cáritas aseguró que, según los últimos datos de los que disponen, se ha “estabilizado” el número de personas atendidas por la oenegé –en el 2011, superó el millón de personas–. “Cáritas da de sí lo que da de sí; tiene límites organizativos, económicos, relacionados con el voluntariado”, señaló, al tiempo que abogó por “la necesidad de que se produzca un cambio de mentalidad: hay que pasar de la emergencia social a la reconstrucción como país”.