Y se divierten
Mo montar una verbena en el adiós a un amigo
fiesta mayor, menospreciadas por la crítica y sectores que identificaban a estos buenos músicos y sus himnos de verano con la estulticia de la dictadura.
Ya tocaban actos como el del martes para ver lo que ha quedado: grandes profesionales, grandes músicos y muy buena gente, que acudieron con toda su carrera a cuestas para montar una verbena en pleno marzo en la desertizada noche de Barcelona.
La velada descubrió detalles inéditos de Ronald, como una canción en catalán de contenido social que grabó a fines de los sesenta y a la que Serrat dio lustre ( Cada dia, un dia mes), su faceta de productor y Pigmalión (Dyango cantó Nostalgia, su primer éxito, producido por el holandés que se afincó en Barcelona) o la elección de Cabrils, donde pasó los últimos 22 años y cuyo ayuntamiento se sumó al homenaje. También lo hizo el ministerio de Cultura, cuyo secretario de Estado, José María Lassalle, envió una condolencia, leída en castellano (“yo creía que alguien pitaría”, decía un espectador).
Tony Ronald reivindicó el respeto a su carrera y a la de tantos compañeros ayer presentes, además de los ya citados: Elsa Baeza, Karina, Mike Kennedy, Jeanette, Alicia y Nubes Grises, Helena de Los Mismos, Santi Carulla de Los Mustang y otros compañeros. Terminaron a coro con Help,
ayúdame. Y a dormir, que el público era honrado y trabajador.