“La gran reforma de la Constitución se está haciendo en Europa”, insiste Rajoy
Lo dijo por primera vez en diciembre pasado, en la rueda de prensa celebrada a final de año en el palacio de la Moncloa, cuando fue preguntado por una reforma constitucional para encontrar un nuevo encaje de Catalunya en España, y desde entonces no se cansa de repetirlo: “La gran reforma de la Constitución vendrá de Europa”. Y fue la frase que el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ayer volvió a repetir en Portugal, cuando fue preguntado por las voces que cada vez de manera más insistente piden una reforma constitucional, unos para solucionar el problema territorial, y otros, ahora, para replantear la forma de Estado, si debe seguir siendo una monarquía, o una república.
Lo que dejó claro es que no es su prioridad porque, a su juicio, España tiene otras, todas ellas relacionadas con Europa, y que resumió en una frase. “España tiene una prioridad de primer orden, que es qué va a ser de Europa, porque de ahí va a venir la gran reforma de la Constitución”. El futuro de Europa en lo que a la unión bancaria y también política se refiere, y en la que se tiene obligatoriamente que avanzar, después de la experiencia de la crisis económica. E insistió: “La gran reforma de la Constitución se está haciendo en Europa”.
Cuándo llegará, no se sabe, por eso obvió la pregunta de si esa reforma constitucional podría acordarse en esta legislatura. Para esas demandas, además de lo que apuntó el lunes, durante su conferencia en las jornadas económicas de The Times, cuando dijo que debe reunir un consenso que vaya más allá del acuerdo entre PSOE y PP, el presidente del Gobierno central insistió en que lo más importante, cuando se plantea la reforma constitucional es “saber qué se quiere reformar”. Puso como ejemplo las dos reformas constitucionales que se han producido, una para ajustarse a Europa y que cualquier europeo pueda votar en las elecciones municipales, y la última, “muy importante, porque de ella deriva la ley de estabilidad”, pactada por PP y PSOE.
Rajoy pidió a quienes abogan por cambios constitucionales que “planteen qué reforma y cual es el objetivo”, y se analice bien si esas modificaciones son una prioridad para los españoles. Las del presidente del Gobierno quedaron claras: profundizar en la unidad europea y en las políticas europeas para propiciar crecimiento económico, creación de empleo, aumentar el bienestar de los españoles y poner unas bases sólidas para mejorar el futuro del país, desgranó Rajoy.