Premio a la carrera de Jane Fonda
En Hollywood cualquiera puede ganar un Oscar o un Globo de Oro con una gran actuación, pero para obtener el premio a la carrera que otorga el American Film Institute (AFI) es imprescindible haberse convertido en leyenda.
Por eso, cuando en la noche del jueves Jane Fonda subió al escenario del teatro Dolby, el mismo en el que se entrega la estatuilla dorada, para recibir el galardón que en 1978 obtuvo su padre, era palpable su emoción. Aún así, se ocupó de remarcar su entusiasmo por haber sumado otra mujer a una lista en la que predominan notablemente los hombres, siguiendo los pasos de Bette Davis, Lilian Gish, Barbara Stanwyck, Elizabeth Taylor, Barbra Streisand y Shirley McLaine. Fonda también le propuso a las muchas celebridades allí reunidas: “hagan preguntas y mantengan la curiosidad. Es mucho más importante estar interesado que ser interesante”.
Michael Douglas, ganador del premio en el 2009, fue el encargado de entregárselo. Quien com- partió con ella cartel en El síndrome de China, por el que Fonda recibió una de sus siete nominaciones al Oscar, que ganó en dos ocasiones, señaló: “entonces aprendí que Jane no solo es una estrella asombrosa, sino que es la mejor mujer orquesta del mundo. Ella era simultáneamente actriz, madre, experta en fitness y valiente militante política”.
Casualmente, Howard Stringer, el presidente del AFI, recordó con un toque de humor que Fonda había estado en la primera entrega del premio, en 1973, cuando lo recibió John Ford, pero no entre los invitados, sino en la puerta y protestando por la presencia de Nixon en la sala.
En la velada, que incluyó numerosos fragmentos de películas y a la comediante Wanda Sykes disfrazada de Barbarella, también habló su hermano, Peter Fonda, su hijo, Troy Garity, Meryl Streep, Sally Field, Cameron Díaz, Sandra Bullock, Jeff Daniels y Eva Longoria. Y en un vídeo especialmente preparado para la ocasión le rindieron homenaje Robert De Niro, Morgan Freeman, Cate Blanchett, Vanessa Redgrave y Annette Bening.