Medicina y humanismo
ENRIQUE PIFARRÉ SANAHUJA (1935-2015) Pionero de la cirugía oral y maxilofacial
El doctor Enrique Pifarré Sanahuja fue el pionero de la cirugía oral y maxilofacial en Barcelona y uno de los padres de la especialidad en España. Con una gran personalidad, honrado y coherente, dejaba huella allá donde fuera y su sonrisa sincera le hacía ser un hombre muy cercano. Como él mismo decía, “en el teatro de la vida te dan un carácter y un papel y tú no escoges ni uno ni otro”. Y él lo bordó. Filántropo, amante de la naturaleza y de su familia, fue un hombre feliz que murió con una sonrisa.
Nacido en Barcelona, Enrique Pifarré estudió Medicina en la Universidad de Barcelona y Estomatología en la de Madrid. Durante dos años perfeccionó sus estudios en Alemania y Austria, trabajando con el profesor Schuchart en Hamburgo, con el profesor Korkhaus en Bonn y con el profesor Hullik en Viena.
En 1970 fue nombrado jefe del servicio de cirugía maxilofacial del hoy hospital Vall d’Hebron, puesto en el que permaneció hasta 1990, en que solicitó su paso a catedrático consultor. Inició su actividad docente como ayudante de clases prácticas de anatomía en 1964. Al crearse la escuela de estomatología de Barcelona en 1971, fue encargado de la docencia de patología quirúrgica maxilofacial. En 1977 consiguió la plaza de profesor adjunto y en 1986, la de catedrático. Tras pertenecer al área de estomatología, pasó al área de cirugía.
Ocupó la presidencia de la Sociedad Española de Cirugía Oral y Maxilofacial desde 1978 hasta 1980, y en 1995 fue elegido presidente de la Sociedad CatalanoBalear de esta especialidad. También fue académico de las Reales Academias de Medicina de Bilbao y Valladolid. Escribió el tratado de Patología Quirúrgica Oral y Maxilofacial, dedicado especialmente a los estudiantes deseando recoger en el libro todo lo que a él le hubiera gustado encontrar en su época de estudiante.
Perfeccionó sus estudios en Hamburgo y Viena antes de darlo todo en Barcelona
Fue una gran persona: humano, afable, sencillo, abierto, pacífico, tolerante y un líder nato que ha dejado una gran impronta en nuestras vidas. Formó un gran equipo con su querida esposa Paloma, sus tres hijos y sus seis nietos. A todos ellos les legó su alegría de vivir. Falleció el pasado 28 de febrero y le recordaremos siempre, especialmente los privilegiados que pudimos compartir con él sus enseñanzas y vivencias. Descanse en paz.