“Los salarios no pueden subir más que los del vecino”
Ál v ar o Nadal, jefe de la oficina económica de la Moncloa
Álvaro Nadal es el jefe de la Oficina Económica de la Moncloa. Madrileño de 42 años, es inspirador de buena parte del discurso económico de la presidencia del Gobierno. Fogueó sus primeras armas políticas de la mano del actual ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro. A partir de 1996, en el entonces Ministerio de Economía, y continuó con Rodrigo Rato. Después formó parte del equipo económico del grupo parlamentario del PP, en los años de la oposición, con Montoro y la actual vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría. Nadal dispone de una visión transversal que le permite trazar un diagnóstico rápido de la economía española, a la que ve metida en un ciclo económico de crecimiento que puede incluso acelerarse si “no se repiten los errores del pasado”.
La previsión de crecimiento económico que maneja el gobierno para este 2015 es del 2,4%, pero algunas instituciones hablan ya de incrementos superiores, incluso del 3% ¿En qué punto se encuentra ahora mismo la economía? Estamos en un proceso de aceleración de la actividad. Y a diferencia de lo ocurrido en ciclos anteriores, España no vive de lo que se endeuda, sino de su capacidad para producir y exportar. Debería ser un ciclo largo en tanto en cuanto mantengamos las ganancias de competitividad obtenidas durante estos duros años de crisis. La economía se parece hoy mucho más a una economía del Norte de Europa, quizás de crecimiento más lento, pero más sólida y más exigente.
Pero para llegar hasta este punto ha sido necesario un ajuste que ha tenido un elevado coste social. E incluso ha provocado incrementos de la desigualdad muy visibles... Es verdad. Ese ajuste ha traído el desempleo. Pero o bien se hacía ese ajuste o la alternativa era salir del euro y argentinizar la economía. Volver a la peseta y volver a hipotecas al 15% y créditos a las empresas al 20%. Y con eso no se crea una economía moderna. Veníamos de la España inflacionista y devaluadora. En la etapa inicial del euro teníamos subidas de salarios y precios del 3-4% cuando en Alemania eran del 1%. El resultado de todo ello era que España se llenaba de productos alemanes. Ahora esto ha cambiado. En Alemania, los precios suben un 0,4% y los salarios un 1%. Mien- tras, en España los precios bajan un 1,1% y los salarios un 0,3%. Estamos ganando competitividad y poder adquisitivo a la vez. Es una oportunidad histórica.
Pero en algunos casos ese crecimiento viene, de nuevo, de sectores como la construcción. Es como volver al modelo de crecimiento anterior a la burbuja inmobiliaria. Déjeme que les diga una cosa. La primera sorpresa de la economía española fue la exportación. Después llegó el crecimiento del empleo, que en el 2014 ha sido fuerte, de medio millón de personas. Y si todo va bien, crearemos otro medio millón de empleos en el 2015. Que ahora vuelva a haber crecimiento en la construcción es lógico. Porque veníamos de muy abajo después del pinchazo de la burbuja inmobiliaria. Lo importante es que sigamos ganando competitividad, que aprovechemos el entorno de bajos precios del petróleo y del tipo de cambio del euro, que incentiva las exportaciones. Que crezcan otros sectores mientras el sector exterior esté en superávit. Esto es lo que arrastra al resto de las actividades y era lo que no pasaba antes
Usted habla de seguir ganando competitividad ¿Hay peligro de recaer? ¿Qué le parecen las dificultades que encuentran los agentes sociales a la hora de negociar alzas salariales? Hay que imitar al norte de Europa, a la Europa que mejor ha hecho la concertación social en los últimos años. En el tema de los salarios, hay que hacer lo que hacen las factorías del sector del automóvil. Vigilar qué hace tu competidor en el resto de la eurozona, que son en realidad nuestros vecinos. Vigilar que los costes no aumenten más rápido que los suyos. Hemos pasado a ser un país de inflación baja, este es ya un rasgo estructural que debemos mantener. Y nos tenemos que acostumbrar a ello. Estamos en fase de aprendizaje.
Vayamos al tema de la financiación de las comunidades autónomas. El Gobierno, a propuesta de Cristóbal Montoro, discutió una posible quita o condonación de parte de la deuda de las comunidades. Finalmente, se descartó y se acordó la reducción de los intereses a 0. ¿Cuál es su propuesta o su punto de vista sobre el asunto? En mi opinión es una discusión ficticia. Todo el dinero sale de los mismos impuestos, del IRPF, del IVA. Con el Fondo de Liquidez Autonómica (FLA) se ha hecho un ejercicio de eficiencia, que ha implicado ir poniendo gran parte
poner toda la deuda en manos del Estado, que es quien puede obtener recursos de los mercados financieros a precios más bajos. Hemos aplicado un esquema común de financiación.
Pero parece que lo que surgió como una solución a una situación de emergencia, la imposibilidad de las autonomías de financiarse directamente en el mercado a precios razonables, ustedes quieren convertirlo en un mecanismo permanente que permite al Gobierno central fiscalizar el gasto de las comunidades... Cuando las comunidades autóno-
AJUSTE O SALIR DEL EURO El ajuste ha traído desempleo, pero o bien se hacía o esto se ‘argentinizaba’
FASE DE APRENDIZAJE Estamos en fase de aprendizaje. Hemos pasado a ser un país de inflación baja GANAR COMPETITIVIDAD Estamos ganando competitividad y poder adquisitivo. Hay que aprovecharlo
LA FINANCIACIÓN La del FLA es una discusión artificial. Todos los impuestos salen del mismo sitio
mas tengan un acceso al mercado tan barato como el Estado, alguien podrá deshacer todo esto. Pero en todo caso, aquí lo que importa es la transparencia de lo que gestionas. Si pagas, pides algo de transparencia a tu administración. Y antes de que se aplicara el FLA había retrasos de 500 días en el pago a los proveedores, lo que lastraba gravemente la actividad económica.
Usted acaba de llegar de Bruselas. Allí ha defendido el papel de las reformas en la evolución se la economía española. ¿Han acabado esas reformas, el Gobierno no presentará ya nuevas iniciativas antes del fin de la legislatura? Nos queda todavía la ley de formación en las empresas, que no es una cosa sencilla. Sacar al mercado el 40% de Aena, la gestora aeroportuaria, la ley de mercado…
La polémica ley de mercado. La Generalitat ha sido muy crítica con ella… ¿Polémica? ¿Por qué? Cuando se critica la ley de mercado, ¿quiere eso decir que lo que es bueno para Europa desde 1978 no lo es para España? Se ha hecho mucha propaganda contra esa ley. Pero las empresas, muchas de ellas catalanas, por cierto, la han recurrido...