Banco de España , moneda electoral
Cada partido defiende una idea para el edificio de Tarragona, que lleva once años cerrado
Por ideas que no quede. Hace diez años que el edificio del Banco de España en Tarragona es propiedad del Ayuntamiento, y hace diez años que está cerrado a cal y canto. Eso sí, cada cuatro, cada partido político lanza su proyecto. Abrió el fuego –medio en broma, medio en serio– el candidato de ICV en las municipales de 2007, cuando propuso convertirlo en mezquita. En 2010, el PSC imaginaba en este imponente y céntrico edificio (en la rambla Nova) una gran oficina turística, pero ahora el mismo alcalde propone un museo de la química. ERC quiere una hemeroteca. El partido municipalista ARA Tarragona, un centro cultural con la Casa de la Festa incluida, y el PP se mantiene en sus trece: una biblioteca con hemeroteca.
Hace cinco años el alcalde anunciaba una gran oficina turística, ahora quiere un museo de la química
Cuando el Banco de España cesó su actividad (el 31 de diciembre de 2003) el Gobierno central tenía un plan: ubicar en el edificio neoclásico las oficinas del servicio de extranjería que tiene en la plaza Imperial Tarraco. El exalcalde Joan Miquel Nadal (CiU) puso el grito en el cielo, aunque fue su sucesor, Josep Fèlix Ballesteros (PSC), quien, en 2010, selló el acuerdo con el Estado permutando el inmueble por un solar de 1.200 metros cuadrados junto la actual Comandancia de la Guardia Civil. Ahí la Subdelegación del Gobierno iba a cons- truir un nuevo edificio para centralizar oficinas y servicios, aunque la crisis ha aplazado sine die este proyecto. Y en el terreno siguen creciendo las hierbas.
Con un cartel gigante en la fachada que decía “Ja és nostre”, Ballesteros anunció el 17 de marzo de 2010 que el Ayuntamiento tenía previsto licitar las obras (por más de un millón de euros), para convertir el edificio en un centro de recepción de turistas y de interpretación de la Tarraco Romana. “Será un punto de inflexión, un antes y un después en la promoción turística de Tarra- gona”, aseguró entonces. Pero el cartel gigante retiró casi tres años después.
Un mandato después, el alcalde Ballesteros ha cambiado de idea. Se acercan elecciones y el PSC tiene nuevo proyecto: el Experience Center, un museo de la química del que poco se pudo detallar, hace un mes, cuando se presentó la idea, que no tiene calendario, ni presupuesto, ni proyecto. “Es un error, una equivocación”, mantiene el alcaldable del PP, Alejandro Fernández. Él puede presumir de defender la misma idea durante las tres últimas campañas electorales: “Una biblioteca con hemeroteca al estilo de las norteamericanas, en un edificio singular, eso es lo que falta en el centro de Tarragona. No tiene porque ser la gran biblioteca de la Tabacalera, que ya veremos cuándo llega, pero cubriría una necesidad importante que reclaman los vecinos del centro”, mantiene. Además, Fernández ironiza: “ERC se ha sumado a lo de la hemeroteca, y ya está bien que coincidamos en algo”. El alcaldable republicano, Pau Ricomà no defiende lo mismo que su antecesor en ERC (era partidario de la gran oficina turística) y también ha lanzado en precampaña la idea de una gran hemeroteca en el antiguo Banco de España.
Quien todavía no se ha definido sobre qué uso destinar al edificio, y se niega a hacerlo por ahora, es el alcaldable de CiU, Albert Abelló. “Ya se verá, lo anunciaremos en su momento”, dicen sus asesores. CiU empleará a fondo esta carta durante la campaña. “Esta forma de hacer política con ideas estrella que cambian cada cuatro años e improvisando no nos lleva a ninguna parte”, mantiene la alcaldable de ICV, Arga Sentís, quien añade que “la ciudad está llena de edificios que tienen un valor patrimonial y que se están degradando”. “Al Banco de España –añade– habría que darle una utilidad rápida, posible y realista para que no se deteriore y habría que escuchar a los técnicos”.
Mientras cae la lluvia de ideas, el deterioro de la vieja sede del Banco de España es evidente. Se suma a la lista negra de edificios cerrados y abandonados en Tarragona pese a su valor y su privilegiada situación, como el antiguo sanatorio de la Savinosa (una finca en primera línea de mar), la Tabacalera, la Ciutat de Repòs o el antiguo hospital Casablanca. La campaña seguro que depara para todos ellos algún proyecto.
El inmueble, ubicado en plena Rambla, es cada cuatro años una fuente de ideas para los alcaldables