Reyerta entre cubanos antes de empezar
La reconciliación entre Estados Unidos y Cuba parece que avanzará más rápido que la cicatrización de las heridas entre los cubanos partidarios y contrarios al régimen que fundó Fidel Castro. Previo a la Cumbre de las Américas se ha organizado un foro de la sociedad civil donde esperaban hacerse oír los grupos opositores de Cuba, de Venezuela y de otros países, pero la delegación oficial cubana se negó a admitir en los debates a la oposición anticastrista como representante de la sociedad civil cubana. “Han inscrito a personas que trabajan por dinero contra su patria, como si fueran representantes de una supuesta sociedad civil, que nada más existe en la imaginación de los que la financian”, declaró Abel Prieto, jefe de la delegación oficial cubana.
Y cuando el miércoles un grupo opositor quiso hacer un homenaje a José Martí en un parque público de la capital panameña, un grupo de activistas del régimen se enfrentó físicamente a los opositores al grito de “abajo la gusanera”. Hubo intercambio de puñetazos y patadas hasta que la Policía panameña practicó una veintena de detenciones. El presidente de Panamá, Juan Carlos Varela, exigió “respeto” a los grupos opositores. “Somos un país que acoge a todos y pedimos respeto a todos”. Los detenidos fueron liberados con la advertencia de que si reincidían serían sancionados. Estados Unidos condenó “los ataques a la libertad de expresión y el uso de la violencia contra manifestantes pacíficos”.