El automóvil encara con optimismo el Salón de Barcelona
El sector pide al Gobierno estímulos para la competitividad
Optimismo y confianza al menos en el corto plazo. Así encara la industria del automóvil el Salón de Barcelona que hoy será inaugurado por Mariano Rajoy. El presidente del Gobierno mantendrá un encuentro con los directivos del sector, que le plantearán la necesidad de seguir estimulando la mejora de la competitividad con objeto de seguir atrayendo inversiones hacia España. Será en un almuerzo al que también asis- tirá el presidente de la Generalitat, Artur Mas, además de los ministros de Industria, José Manuel Soria, y de Interior, Jorge Fernández Díaz.
Gran parte de los directivos se mostraban ayer confiados en que Rajoy anuncie hoy mismo una nueva edición del plan PIVE, la octava. Estaría dotada con 235 millones y su principal novedad sería una reducción de las ayudas: 750 euros aportados por la Administración y otros 750 por las marcas. En total, 1.500 euros , frente a los 2.000 de las anteriores ediciones, según ha ido avanzado el Gobierno a las organizaciones del sector.
Para la asociación de fabricantes Anfac, el PIVE es necesario, al menos hasta finales de año para afianzar la recuperación y recuperar la cota del millón de coches matriculados, de la que España se alejó durante estos largos años de crisis. Y María Seguí, directora de la Dirección General de Tráfico (DGT), contribuyó a echar un cable aprovechando la clausura del congreso de la asociación de concesionarios Faconauto, que se ha celebrando en el marco del Salón. bajo la presidencia de Jaume Roura. Según Seguí, el importante incremento de las matriculaciones de vehículos de los dos últimos años no está influyendo en una reducción de la edad media del parque de vehículos. Así, España cuenta en la actualidad con el parque automovilístico más antiguo de toda Europa. Por eso, María Seguí abogo por la continuidad del PIVE y sugirió que además se incorporen criterios de seguridad vial.
Pero las demandas del sector van más allá del PIVE, Como dijo ayer, el presidente de Anfac, José López-Schümer (Mercedes Benz), es preciso rebajar los costes energéticos y logísticos para mantener las ventajas competiti-
La directora de la DGT se alinea con el sector e instan una renovación del parque
El presidente de Anfac señala que hay que aspirar a fabricar cuatro millones de vehículos
vas que han situado al sector español noveno en la lista de países productores de vehículos y segundo en el europeo.
El objetivo a corto plazo que se han marcado los fabricantes es elevar la producción a tres millo- nes de vehículos. En el 2014 se llegó a 2,4 millones y en lo que va del 2015 ha crecido un 15%. Sin embargo, López-Schümmer indicó que hay que ser más ambicioso, no debe caer en la autocomplacencia y aspirar a 4 o 4,5 mi-
llones de vehículos. La logística, con mejores comunicaciones tanto por carretera, por ferrocarril o por vía marítima, es uno de los grandes caballos de batalla del sector. Es lógico si se tiene en cuenta que la logística supone aproximadamente un 10% de los costes de producción, mucho más que los laborales, que representan entre un 7 y un 8%.
Respecto al PIVE, los ejecutivos del sector admiten que su principal efecto es “psicológico”, pues lo que hace es animar a las familias a cambiarse el coche, independientemente del importe en sí de las ayudas. Es más, fuentes de Renault reconocen que su oferta de mantener un descuento de 2.000 euros sufragado íntegra- mente por la marca no ha tenido ni de lejos el impacto que un PIVE con ayudas del Estado..
En la misma línea, se pronunció Marco Toro, consejero director general de Nissan Iberia, que alertó del efecto negativo que podría suponer cortar las ayudas del golpe. Toro abogó por una “disminución gradual”. “De 1.000 euros a cero hay diferentes etapas”, remarcó. “Es importante mantener el PIVE aunque sea con un importe más reducido”, porque contribuye a romper la “barrera psicológica” a la hora de tomar la decisión de comprar un coche., dijo Mikel Palomera, director de Seat España.
Para Palomera, un país como España debería alcanzar un volumen de matriculaciones de al menos 1,2 millones de vehículos, que es lo que le correspondería con relación a su población y renta.
En cualquier caso, se respira a un ambiente de confianza en el Salón, que tiene a Enrique Lacalle como presidente del comité organizador. Animadas por los signos que apuntan a una recuperación del consumo interno, las marcas han hecho un esfuerzo importante en sus stands, con inversiones que en algunos casos llegan al millón de euros, y al mismo tiempo se ha conseguido darle más contenido económico e institucional.
No han venido todas las marcas, pero casi. Y eso supone un éxito si se tiene en cuenta que la tendencia de las multinacionales es participar cada vez menos en salones europeos, más allá de los grandes de Ginebra, Frankfurt, y París.
El plan ayuda a romper la barrera psicológica de cambiarse el coche
Los signos de recuperación del consumo animan a las empresas