La Vanguardia

Collboni pide a Trias claridad sobre su independen­tismo

El alcaldable del PSC dice que los candidatos han de ser francos en sus propósitos porque tendrán repercusio­nes sobre la ciudad

- RAMON SUÑÉ JAUME V. AROCA VEA EL VÍDEO DEL DEBATE DE TRIBUNA BARCELONA http://bit.ly/1IlCOCR

El candidato del PSC a la alcaldía de Barcelona, Jaume Collboni, se ha propuesto arrancar una confesión de Xavier Trias antes de que termine la campaña. ¿El hoy alcalde de Barcelona es o no es independen­tista? Collboni, que ayer intervino el un almuerzo de la Tribuna Barcelona subrayó la ambigüedad del alcalde en este punto. Trias “da apoyo a los actos de la Assemblea Nacional de Catalunya y luego –sostuvo– quiere esconder el debate sobre su posición sobre el derecho a decidir”.

El candidato del PSC considera que una respuesta clara de Xavier Trias y del resto de sus adversario­s, incluida Ada Colau, es relevante porque puede influir en algunos proyectos para los que Barcelona ha de contar con el apoyo del Estado y de la Unión Europea. En su opinión la disyuntiva es: “Dieciocho meses para acabar la línea 9 o dieciocho meses para proclamar la independen­cia, porque ambas cosas no son compatible­s”. Jaume Collboni consideró que “en esta campaña los políticos han de ser claros. No puede haber ambigüedad en el contrato. Hemos de dejar clara cuál es nuestra propuesta sobre el futuro de Catalunya”. Por supuesto, Collboni se declaró federalist­a.

Al almuerzo del foro Barcelona Tribuna, una iniciativa de la Societat Econòmica Barcelones­a d’ Amics del País, La Vanguardia y la Asociación Española de Directivos, Jaume Collboni llegó arropado por algunos dirigentes del PSC, entre ellos el alcalde Jordi Hereu, que formuló la presentaci­ón muy elogiosa del candidato; el primer secretario del partido, Miquel Iceta, o la secretaria de organizaci­ón del PSC y concejal hasta el presente mandato, Assumpta Escarp. También participar­on algunos ediles que repiten y otros que han quedado excluidos de la candidatur­a e incluso una de sus rivales en las prima- rias socialista­s de Barcelona, Laia Bonet.

Collboni señaló las dos prioridade­s de su programa de gobierno para Barcelona: “crear ocupación y combatir las desigualda­des” porque, a su juicio, ambos han sido los dos problemas no resueltos del mandato: una ocupa- ción que, digan lo que digan ,no levanta cabeza y una desigualda­d que ha ido en aumento. Hay –añadió– una dimensión moral en el combate de la desigualda­d pero –advirtió– también se pone en riesgo el pacto social”.

Para combatir este escenario, Jaume Collboni defendió un plan de políticas anticíclic­as que reprochó a Xavier Trias no haber desarrolla­do. No obstante, aseguró que su programa será fiel a la disciplina económica que permitió a los socialista­s dejar en herencia a Trias en 2011 unas cuentas saneadas del Ayuntamien­to de Barcelona: “congelació­n de los impuestos, ahorro bruto del 15% y nunca un nivel de endeudamie­nto que supere el 60%”.

En el turno de preguntas, cuando los candidatos se ven obliga- dos a entrar en precisione­s, Collboni aseguró que él sigue siendo partidario de unir los dos extremos de la red de tranvía aunque admitió que podría estudiar alguna alternativ­a a la Diagonal. Respecto al turismo, aseguró que se propone dejar de improvisar medidas como ha ocurrido, en su opinión, en este mandato. “Ha de haber reglas claras”, sentenció.

En el mismo turno de preguntas el adjunto a la dirección de La Vanguardia, Enric Sierra le preguntó al candidato del PSC si iba a respetar la tradición política barcelones­a en la que siempre se ha permitido al candidato del partido más votado asumir la alcaldía. La respuesta de Collboni fue, en cierto sentido críptica y deja muchas incógnitas: “si no soy el candidato más votado no tengo en la cabeza entrar en el gobierno. Ha de ser alcalde el que tenga más votos. Luego –precisó– se verá si logra la estabilida­d”.

Con las encuestas publicadas en las últimas semanas parece evidente que un gobierno estable necesitará de la participac­ión de al menos cuatro partidos políticos para consolidar­se y el PSC, como fuerza a medio camino entra el voto centrado de CiU y la izquierda emergente liderada por Colau, puede tener una papel relevante.

No puede haber ambigüedad, ha de quedar clara cuál es la propuesta sobre el futuro de Catalunya” El PSC respetará al candidato más votado, “otra cosa es que luego logre estabiliza­r su gobierno”

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MANÉ ESPINOSA Jaume Collboni en el curso de su intervenci­ón en Barcelona Tribuna

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