Ruido insoportable
Llevo un montón de años sin poder dormir por las noches por culpa de los disparos virtuales de las petadoras para asustar jabalíes. El payés que las coloca en sus campos y bosques, tocando a mi casa, no tiene ninguna consideración con los vecinos ni con los incendios y abusa con disparos fuertes o flojos y seguidos. Las autoridades sólo actúan la noche siguiente a las quejas.
La irracionalidad en nuestra sociedad aumenta. Ni los derechos más evidentes se respetan, aunque los ruidos se metan en tu casa sin permiso, como ladrones.
Sobre la ecología se habla mu- cho, pero nadie se la toma en serio. Y se van perdiendo los derechos básicos. Sólo se mueve lo que representa interés económico, mientras los creadores y promotores no avanzan en este mundo irracional y sin principios. Tenemos una Generalitat distraída y ausente; sólo ocupada en temas políticos intrascendentes y olvidando lo más inmediato.
En la urbanización Banyoles Park, un lugar paradisiaco, la ecología está desatendida. Habiendo como hay métodos no acústicos para ahuyentar jabalíes (como las vallas y el pastor electrónico), lo más fácil son los malditos ruidos que te despiertan continuamente... ¿Y tus derechos básicos? Vilmente pisoteados. Pido ayuda a quien pueda evitarlo, por favor.
JOAQUÍN DURALL
Banyoles