Sánchez llama a los catalanes a llevar también el cambio a España
Iceta ironiza que el 27-S sí que es un plebiscito a favor o en contra de Mas
Haría bien el PSC en incorporar el Don’t stop me know de los Queen y abandonar la armónica de la pieza musical oficial de campaña. Si alguien creía que los socialistas catalanes, vistas las encuestas poco favorables, se pasearían como un alma en pena durante la campaña, la verdad es que su líder, Miquel Iceta, está transmitiendo un ánimo inusual y se le ve con fuerza. “Me siento vivo, no me pares porque me lo estoy pasando muy bien” y “no hay nada que me pare” dice la canción. Pues eso.
Ayer, como ya hizo en el acto de inicio de campaña, el candidato del PSC a la presidencia de la Generalitat volvió a bailar y cantar, esta vez no tan desacomplejadamente, pero arrastró a Pedro Sánchez en sendos actos en Tarragona y Badalona. Un Pedro Sánchez que ha venido a Catalunya a apoyar Iceta, pero que, en la práctica espera recoger los frutos para las generales: “El cambio en España vendrá de la mano del cambio a Catalunya”, resumió.
El secretario general del PSOE atacó de una tacada y sin miramientos tanto a Mariano Rajoy como a Artur Mas: “Mas dice que España no nos quiere, que España es Rajoy,” y después de preguntar a la audiencia si él se parece al actual presidente del Gobierno, aseveró que España no se reconoce en “un Go- bierno de extrema derecha que llama terroristas a los que huyen del terror en Siria”.
Sánchez negó que España “robe” a Catalunya: “Quien roba a Catalunya tiene nombres y apellidos y están en CDC y el PP”, atizó. Pero no quedó aquí la cosa. Sánchez reprochó a ERC y a las formaciones escindidas del PSC que acompañen a CDC en Junts pel Sí: “A estos que van juntos con Mas se les tiene que preguntar si hay una corrupción mala del PP y una que no lo es, la de CDC. ¿Por qué criticáis la corrupción del PP y calláis la de Convergència?”. Y concluyó con uno rotundo: “¡hipócritas!”.
Para Sánchez, Rajoy ha gobernado solo y enfrentado a todo el mundo: contra las mujeres, recortando la ley de interrupción voluntaria del embarazo; contra la cultura subiendo hasta el 21% el IVA; contra las libertades sociales con la ley mordaza; contra los trabajadores, con la reforma laboral. “No nos gusta la España de Rajoy”, concluyó el máximo dirigente socialista.
El líder del PSOE esgrimió todas estas razones para pedir la movilización del electorado socialista y “progresista” catalán, al que recomendó que se tomara el 27-S –las elecciones en que más suele participar– como si fueran las generales. Igualmente, reclamó el apoyo de los indecisos, “porque nos jugamos el futuro”. “Nadie se puede quedar en casa”, añadió.
Iceta, en Badalona, hizo suyas las palabras de Sánchez, y pidió también que los ciudadanos vayan masivamente a las urnas ante unas elecciones “trascendentales”. Y dio la razón sardónicamente a los que dicen que el 27-S es un plebiscito: “Si gana Mas, seguirá el lío el tiempo que haga falta y cada vez más envenenado; si pierde Mas, se abrirá un espacio para encontrar una solución de acuerdo entre los catalanes y el resto de los españoles”.
El candidato del PSC volvió a cargar contra el presidente de la Generalitat por “esconderse”: “Nosotros no escondemos la sigla, el PSOE está con nosotros y tenemos un lema bien explícito: vota socialista”. Además, reprochó a las candidaturas independentistas que “no tienen programa más allá de votar un día que sí... y después?”. Iceta reivindicó las propuestas del PSC, que se sustentan en cuatro ejes: reactivar la economía y crear puestos de trabajo, proteger el Estado de bienestar, recuperar el prestigio de la política luchando contra la corrupción, y mejorar el encaje de Catalunya en España con la propuesta federal.