Girona, el granero más independentista
Ciutadans quintuplica sus votantes en Palamós, Palafrugell o Roses
El cabeza de lista de Junts pel Sí por Girona, Lluís Llach, destacaba durante la noche electoral los buenos resultados de las fuerzas soberanistas en la demarcación. “Girona ha estado en primera línea con un gran resultado. Casi que podemos empezar nosotros solos”, ironizaba, refiriéndose a iniciar el camino hacia la independencia. Un mensaje que coincidía con el que algunos difundían en las redes sociales. La suma de la candidatura de Junts pel Sí (que fue la fuerza más votada en todos y cada uno de los 221 municipios de Girona) y la CUP sumaron 12 escaños de los 17 posibles (11 de Junts pel Sí y 1 de la CUP) y cerca del 65% de votos. Unos datos que convierten a la provincia en la más independentista, seguida a muy poca distancia de Lleida.
De entre la geografía catalana destacan los números del Pla de l’Estany y Banyoles, la comarca y capital de comarca respectivamente más independentistas de toda Catalunya. La suma de las dos formaciones soberanistas alcanzó el 83% de los votos en el Pla de l’Estany y un 82% en Banyoles. El politólogo Xavier Crehuet habla de “efecto cima” para explicar esta idiosincrasia. “La media de los resultados de los partidos nacionalistas e independentistas en la comarca siempre han estado por encima de la media de los resultados de Girona, y las resultados de la demarcación, por encima de los de Catalunya”, afirma. “Girona es la punta de lanza del independentismo en Catalunya”, aseguraba ayer David Mascort, presidente de ERC en Girona. “Es una evidencia desde hace tres o cuatro años que el independentismo va in crescendo y eso se nota en la afluencia masiva a los actos que tienen relación con el proceso”, agregaba ayer el presidente de CDC, Pere Vila.
Si bien la formación se felicitaba por los resultados obtenidos, la alegría no era del todo completa. La pérdida de un diputado de Junts pel Sí cuando el escrutinio estaba muy avanzado (superaba el 80% de voto escrutado) a favor de la candidatura de izquierdas Cata-
LA MÁS SOBERANISTA En el Pla de l’Estany, la CUP y Junts pel Sí sumaron un 83% de los votos
lunya Sí que es Pot ha dejado un cierto sabor amargo en las filas de algunos representantes políticos. Si bien durante los últimos compases del escrutinio se especuló con que el voto en el extranjero podría hacer bailar de nuevo este escaño a favor de Junts pel Sí, ayer por la tarde el candidato de Catalunya Sí que es Pot en Girona, Marc Vidal, aseguraba que es matemáticamente imposible que ocurra porque no hay suficientes votos. “Se pidieron 1.900 votos exteriores en la demarcación. Junts pel Sí debería sumar más de 4.400 votos y nosotros ninguno para que cambiara el resultado”, afirmó.
Más allá de la victoria aplastante de las formaciones nacionalistas, destaca en Girona el crecimiento de Ciutadans, que ha multiplicado por cuatro el número de votantes. La formación de Albert Rivera, que se ha convertido en segunda fuerza en el global de la demarcación y en comarcas como La Cerdanya, Alt Empordà, Baix Empordà, Gironès y la Selva, destacaba “el reto” que suponía que su mensaje calara en la provincia más independentista. Ayer, Jean Castel, su cabeza de lista y concejal en el Ayuntamiento de Girona (cargo que dijo que dejará cuando vaya al Parlament), destacaba que en poblaciones como Palamós, Palafrugell, Llagostera o Roses han multiplicado por cinco los votos respecto a las elecciones del 2012. Ciutadans obtiene sus dos escaños gracias a la debacle tanto del PSC como del PP, que perdieron uno de los dos que tenían hasta ahora.