El Barça se queda a medias
La caída de Blatter, con quien el club había roto relaciones, reconforta, pero a Platini se le apoyaba como sucesor
El FC Barcelona no vive ajeno al colosal escándalo que afecta a los principales rectores del fútbol mundial, Joseph Blatter como presidente de la FIFA y Michel Platini como presidente de la UEFA. La suspensión en el cargo del primero durante un período de 90 días ha provocado en el seno de la junta directiva blaugrana una sensación de alivio apenas disimulada. Blatter se había convertido en los últimos años en azote del club, hasta el punto de que el presidente Josep Maria Bartomeu había decidido romper toda relación entre ambas partes a la espera de que las elecciones del 26 de febrero para elegir a su sucesor inauguraran un periodo más propicio para la entidad. La paradoja del asunto es que precisamente el candidato favorito del FC Barcelona, acordado tras lograr el consenso con el resto de clubs europeos que configuran la ECA, era Michel Platini, suspendido ahora, arrastrado por Blatter, como máximo mandatario de la UEFA y cuyo futuro en los órganos de poder del fútbol internacional parece a día de hoy de escaso recorrido.
Los últimos males de la historia reciente del Barça llevaban la firma de Blatter. Empezando por los castigos, cada vez más severos, contra un gran número de menores de edad comunitarios y extracomunitarios vetándoles la disputa de partidos oficiales e incluso residir en La Masia, y acabando con la sanción, relacionada con el primero castigo, de prohibir el fichaje de jugadores para el primer equipo durante dos ventanas de mercado. En relación a este segundo caso, el club blaugrana mantiene todavía un litigio con la FIFA, ahora presidida con carácter de interinidad, para poder inscribir a Arda Turan en lugar del lesionado de lar- ga duración Rafinha, una opción amparada por la normativa de la Federación Española pero puesta en tela de juicio por el organismo superior. El Barça, de hecho, ya ha tomado la decisión de recurrir al Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS) en caso de que el Comité de Apelación de la FIFA, última instancia al respecto, rechace el recurso del club blaugrana. En cualquier caso el Barça no tiene pensado alinear a Arda Turan sin obtener antes el permiso correspondiente, entre otras cosas porque es la Federación Española quien debería antes tramitar la ficha y esta no quiere arriesgarse a recibir una sanción que probablemente recaería sobre la selección española de fútbol.
Respecto a Michel Platini se abre un periodo de gran incertidumbre. El francés era visto como candidato ideal a suceder a Blatter por el Barça, que había encontrado comprensión y sintonía en varias tomas de contacto con el ahora suspendido presidente de la UEFA albergando esperanzas de un nuevo marco de relaciones más allá del 26 de febrero, día de las elecciones.
El panorama imaginado, de repente, ha volado por los aires. La afectación del sistema no deja fuera de combate sólo a Blatter sino que se puede llevar por delante a Platini, así que el Barça permanece a la expectativa y no le toca otra que trabajar conjun-
A ZOTE Muchos males del Barça llevaban la firma de un Blatter que va desapareciendo del mapa
DESCONCIERTO Si Platini no es la alternativa, la ECA tiene un problema y poco tiempo para reaccionar
tamente con los otros grandes clubs europeos para prepararse ante lo peor, es decir, la probable eliminación de Platini como futuro aliado al frente de la FIFA.
Dentro ya del terreno de las hipótesis, es obvio que la ECA tiene la obligación de apresurarse y fabricar un nuevo aspirante que consiga poner de acuerdo al fútbol continental de aquí al 26 de octubre, fecha límite fijada para la presentación de candidatos. Ninguno de los que fueron oposición de Blatter en los últimos sufragios celebrados el pasado mes de mayo parecen reunir las condiciones ideales, así que urge encontrar una nueva cara, limpia de toda sospecha, que irrumpa en el escenario de forma convincente. Una misión difícil y que debe ser tomada a contra reloj.