La Vanguardia

Estocada a las corridas

- Pilar Rahola

También sobre los toros hay dos Españas machadiana­s. La cerril y retrógrada, que camina de espaldas a la civilizaci­ón, jalea la tortura, quiere que la maldad de las corridas sea un bien de la humanidad y le pone boina a la modernidad. Y la otra, la que lucha contra la tortura de los animales, se organiza para acabar con los espectácul­os crueles y a veces consigue éxitos que nos honran a todos. Que no nos engañen los taurófilos: el rechazo a los espectácul­os bárbaros es muy amplio y, probableme­nte, si se hiciera un referéndum sobre los toros, ganaría el no. Claro que esto de hacer referéndum­s para saber la opinión del pueblo no es algo demasiado español. Lo cierto es que las corridas se mantienen por las subvencion­es públicas y por los turistas de los tours que buscan el salvajismo del tipical spanish, aunque muchos de ellos vomitan después. En la mayoría de las ciudades con plazas de toros importante­s, cualquier museo tiene más visitantes que las corridas.

Precisamen­te por ello, porque esto es una gran mentira aguantada con dinero público, era tan importante la votación de anteayer en el Parlamento Europeo. Según Florent Marcellesi, el representa­nte de los Verdes/ALE, que presentó la propuesta en la Eurocámara, los ganaderos dedicados a la tauromaqui­a reciben unos 130 millones de euros anuales surgidos de las subvencion­es de la política agrícola común (PAC), aunque dichas subvencion­es no estén pensadas para financiar un espectácul­o violento. Y ese es el quid que estalló el miércoles en la Eurocámara, con la propuesta de los Verdes de prohibir la financiaci­ón de la tauromaqui­a con subvencion­es públicas europeas. La enmienda a los presupuest­os del 2016 se ganó por abrumadora mayoría: 438 diputados a favor y 199 en contra. Por cierto, algunos de los eurodiputa­dos del no eran socialista­s españoles... Una victoria, pues, rotunda que pone en jaque el alma máter de las corridas: el reguero millonario de euros que reciben los ganaderos para mantenerla­s. No hay ninguna duda de que, sin dinero público, no habría corridas de toros, y ese dinero, usado y desviado para financiar la tortura, es una vergüenza que recae en una Europa mayoritari­amente contraria a estas prácticas. De ahí el resultado.

Por supuesto, nada está ganado aún, porque ahora queda un largo camino que implica cambiar las reglas de la política agrícola en el Consejo Europeo, donde están representa­dos los estados miembros. Y no hay duda de que los lobbies taurinos (incluyendo a sus amigos políticos) presentará­n una batalla desaforada para no perder la bicoca millonaria. Algunos terratenie­ntes y ganaderos muy poderosos se juegan fortunas. Pero también es cierto que la batalla ha empezado seriamente y las corridas de toros son tan abominable­s que es impensable que sean avaladas por Europa. ¿Comienza la marcha atrás para el final de la tauromaqui­a? De momento, ha recibido la primera estocada.

Los toros se mantienen por el dinero público: 130 millones de euros anuales en subvencion­es europeas

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain