El naufragio de Djordjevic
El Barça Lassa doblega con un juego efectivo a un Panathinaikos sin recursos
Victoria de oficio del Barcelona Lassa ante un Panathinaikos que llegaba en cuadro y con un pobre fondo de armario y demostró ser un gigante con pies de barro ya en esta fase de grupos. Acogido con indiferencia en su retorno al Palau, Sasha Djordjevic cayó con estrépito ante un Barça que lo hizo fácil y exhibió un buen juego coral para sumar su segunda victoria en la Euroliga.
Los griegos pagaron demasiado cara la baja de última hora de Jankovic –a la que se sumó la de un Kuzmic que no tuvo minutos– y las ya conocidas de Papas y Bochoridis. Aunque sobre todo pagaron la falta de alternativas y de jugadores con experiencia en el banquillo, ya que ni Chara-lampopoulos ni Papagiannis, dos apuestas de la cantera del club griego con apenas 18 años cada uno, no demostraron estar a la altura de un duelo como el de anoche. Desaparecidos estuvieron también los vetera- nos Fotsis y un Diamantidis que no logró dar su primera asistencia hasta el final del segundo cuarto, cuando su equipo ya perdía de 16 puntos.
El Barça salió a jugar sin arriesgar mientras Raduljca cometía dos faltas de ataque en los primeros minutos y Pavlovic otras dos defensivas para forzar a Djordjevic a cambiar de planes ya en el primer cuarto, cuando los griegos ya dejaban claro que venían a tratar de resistir con posesiones largas y pocas alternativas de juego. Sin hacer nada, los blaugrana se hicieron dueños del juego y del marcador para cerrar ese primer cuarto 17-11 y dominar con claridad el segundo, en el que el disparo exterior de Doellman, dos triples consecutivos de Arroyo y el trabajo de Tomic bajo el aro les permitieron distanciarse hasta un +18 (40-22) frente a un Panathinaikos con un porcentaje de tiro de campo que no alcanzaba el 40%.
La reacción griega, obligada, llegó tras el descanso, más por dejadez blaugrana que por el juego del equipo visitante. En el inicio de ese tercer período el Panathinaikos arrancó con parcial de 2-13 para rebajar la diferencia a 7 puntos (42-35). Un espejismo, ya que el Barça regresó al partido bajo la dirección de Navarro y el dominio de Tomic en la zona y en el último cuarto Samuels ya conseguía mejorar la máxima ventaja de su equipo (64-44 a falta de 5m54s), que llegaría a ser de +25.