Series a pie de página
Una de las consecuencias más directas, sorprendentes y por descontado positivas que ha acarreado el ya imparable aumento en nuestro país de la seriefilia a prueba de spoilers ha sido, sin lugar a dudas, el gran número de publicaciones especializadas que han aparecido al respecto por estos lares. Basta con echar un vistazo al rincón de novedades de cualquier librería mínimamente bien surtida para comprobar que la burbujeante tendencia editorial, lejos de ser un fenómeno pasajero, lleva camino de convertirse en una más que saludable costumbre. Y yo que me alegro por la colateral parte que me toca.
Académicos, divulgativos, coyunturales, antológicos, generalistas, didácticos, anecdóticos e incluso hipstéricamente frívolos, libros sobre series los hay ahora para todos los gustos y colores. Los de Errata Naturae, por ejemplo, tras dar buena cuenta de títulos tan emblemáticos como Breaking bad, Juego de tronos, True detective, The walking dead, Los Soprano o The wire, lanzaron hace algunos meses el más que recomendable Mad men, o la frágil belleza de los sueños en Madison Avenue, un volumen dedicado íntegramente a las cuitas erótico-existenciales de Don Draper y compañía.
De signo bien distinto es el interesantísimo (y más académicamente oportuno que nunca) La política en las series de televisión: Entre el cinismo y la utopía, multidisciplinar acercamiento a algunas de las series que de forma más lúcida, crítica y contundente han hecho de la maquiavélica lucha por el poder su principal premisa dramática (de The good wife a House of cards, pasando por Crematorio, Borgen, The thick of it, la trilogía Red Riding o The newsroom). Uno de los últimos en sumarse a la concurridísima fiesta ha sido el siempre lúcido Quim Casas, perro viejo en esto de la crítica audiovisual que acaba de entonar su muy particular (e intransferible) mea culpa seriéfilo en el recién publicado La vida va en serie, libro en el que glosa las virtudes y logros de las que según su parecer son las 75 ficciones televisivas (de todos los tiempos) que más le han marcado.
Mención aparte por lo que realmente tiene de extraordinario merece sin duda el volumen titulado Dentro de El Ministerio del Tiempo, obra coral editada por esa auténtica pionera en esto de las series que es mi buena amiga Concepción Cascajosa. Con escalofriante prólogo del propio Javier Olivares, el libro amplifica aún más si cabe el enorme eco multimediático que ha alcanzado con únicamente una temporada a sus espaldas esta revolucionaria serie tan atypically spanish. Aunque sólo fuera por el hecho de que todos los especialistas que en él participan decidieron donar íntegramente el 100% de los derechos de autor que su venta pudiera generar a la Fundación Española para el Fomento de la Investigación de la ELA (esclerosis lateral amiotrófica, terrible enfermedad neurodegenerativa que hará poco más de un año acabó con la vida del cocreador de la serie, el enorme Pablo Olivares, poco antes de que este pudiera verla estrenada), aunque tan solo fuera por eso, esta publicación resultaría ya imprescindible. Que siga la racha.
Libros sobre series hay para todos los gustos y colores: académicos, divulgativos, antológicos, generalistas, didácticos...